El seguimiento conjunto a un carterista, que había sido visto merodeando posibles víctimas en el Casco Viejo durante la penúltima noche sanferminera, la del domingo 13 de julio, por parte de agentes de la Policía Foral y de la Policía Municipal de Pamplona ha dado finalmente sus frutos con el arresto de hasta cuatro personas, oriundos de Perú y que residen fuera de la capital navarra, acusados de formar parte de un grupo criminal organizado dedicado al hurto.

Seguimiento desde el Casco Viejo

Uno de sus integrantes fue interceptado en el Casco Viejo durante la madrugada y llamó la atención de los agentes por su actitud. Sin embargo, en el momento que se intervino con él no estaba en posesión de bienes ajenos. Sin embargo, los policías le siguieron la pista porque no se fiaban de sus intenciones.

De esta forma, a través de un patrullaje de paisano y ayudados también por las cámaras del Ayuntamiento que les han ido guiando para que el individuo no sospechara de la presencia policial, han terminado finalmente en el aparcamiento de los Corralillos del Gas. Ahí han podido comprobar cómo esa persona tenía que devolver un coche de una empresa de alquiler y antes de que lo hiciera, se ha procedido a registrar el vehículo.

Y en efecto, dicho análisis ha sido certero hasta que se han localizado una docena de móviles ocultos en el coche. Otra persona ha sido arrestada junto al individuo al que han ido siguiendo y, finalmente, dos más que se encontraban en el centro de Pamplona han sido puestos en relación con los anteriores. La Policía Foral ha procedido a las detenciones y los cuatro se encuentran en los calabozos del cuerpo autonómico.