“De las cuatro temporadas en Anaitasuna, esta es la que más satisfecho me deja y de la que más contento me siento”. Así de contundente se expresaba este miércoles Quique Domínguez al hacer balance de la campaña 2023/2024 recién finalizada y en la que su equipo, el Helvetia, ha concluido en una meritoria novena posición gracias a sus 30 puntos. Un curso que, tras numerosos cambios, salidas de peso y ajustes presupuestarios, se presentaba con incertidumbre allá por el mes de agosto, pero al que el conjunto navarro ha sabido hacer frente a nivel de resultados y de juego, lo que le permite al técnico gallego valorarlo “muy positivamente” tras su cierre.

Domínguez, acompañado por parte de su cuerpo técnico, resaltó el trabajo de un equipo “que ha jugado francamente bien, transmitiendo muchísimas cosas a los que nos han podido ver y nos han seguido durante todo el año, algo extraordinariamente importante”.

Fiel defensor del coaching, el preparador gallego puso sobre la mesa frente a la que hablaba la figura de un faro que ha acompañado a la plantilla del Helvetia durante toda la temporada –el año pasado fue un cuaderno– y que, dijo, quería que sirviera como guía de un equipo “valiente, atrevido y descarado”, a la vez que recordarse que el objetivo del curso iba a estar enfocado “en mejorar y en construir” el grupo.

“El equipo ha jugado francamente bien, transmitiendo mucho a quienes nos han podido ver"

QUIQUE DOMÍNGUEZ - Entrenador del Helvetia Anaitasuna

En una extensa y detallada comparecencia, Quique Domínguez recordó “la malísima noticia” con la que Anaitasuna inició la pretemporada, después de que el portero Marcos Cancio se rompiese el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha en el Torneo Egia. Una circunstancia que se ha repetido en el final de la Liga, puesto que el jugador del filial Endika Longás ha corrido la misma suerte “entrenando con nosotros”. 

Asimismo, subrayó “el descaro” con el que irrumpieron jugadores jóvenes como el canterano Marco Moreno, quien firmó una notable primera vuelta desde el central, y que contribuyeron a acabar el primer tramo liguero “con 15 puntazos”. Un Marco Moreno que no pudo participar en la Copa del Rey, el “primer borrón” de la temporada para el Helvetia al caer con dureza frente al Antequera de División de Honor Plata, ya que un profesor suyo –estudia Enfermería– “le dijo que si acudía, iba a suspender”.

Quique Domínguez, durante su comparecencia. Iñaki Porto

En su análisis del comienzo de 2024 y del inicio de la segunda vuelta, el entrenador de Anaitasuna resaltó el regreso de Ander Torriko después de casi tres años sin jugar como “la mejor noticia” que, sin embargo, se vio empañada por la concatenación de lesiones que sufrió el equipo. Empezando por la trombosis de Ernesto Goñi, de la que se recupera tras ser operado esta misma semana, pasando “por la lesión muscular de Julen Elustondo, las de Bazán, Martín Ganuza, la peritonitis de Bonanno” o la luxación en el hombro que se produjo el propio Marco Moreno en febrero en la pista del Fraikin Granollers y que, además de obligarle a pasar por el quirófano, le ha mantenido fuera de las canchas desde entonces. En este punto, además, Domínguez quiso poner en valor el detalle protagonizado en el Palau d’Esports por un compañero rival. “Al final del partido hay un jugador, que se llama Pablo Urdangarin, que le pide permiso en la puerta del vestuario a Mintxo Ibarrola –delegado de Anaitasuna– para ver si puede entrar a interesarse por Marco”. “Me encantó ver la educación, la clase y la elegancia con la que entró allí”, apuntó el técnico gallego.

El aliento de los exjugadores

Domínguez, además, hizo referencia a la charla previa en el último encuentro liguero frente al Nava, que protagonizaron tres exjugadores de Anaitasuna: Carlos Chocarro, Xabi Etxeberria e Ibai Meoki. “Superó absolutamente todas las expectativas. Estoy seguro que fue uno de los grandes momentos de la temporada. Los que la vivimos salimos con el corazón encogido”, afirmó. “Me siento muy orgulloso de que estos tres exjugadores hayan estado tan cerca del equipo y sean inspiración”, constató.

El técnico gallego, al que aún resta una temporada de contrato en el club, tuvo finalmente palabras para el capitán Antonio Bazán, quien no comenzará la próxima temporada con Anaitasuna por su formación médica, que le llevará fuera de Navarra. “Es imposible de sustituir. En el día a día demuestra su nivel de concentración, autoexigencia y compromiso”, resaltó. Domínguez confirmó que, durante su ausencia, portará el brazalete Aitor García.