FRIGORÍFICOS DEL MORRAZO 30
HELVETIA ANAITASUNA 30
Frigoríficos del Morrazo Jorge Pérez, Arnau Fernández (4), Santi López, Fodorean (2), Omar Sherif (4), Gayo (4) y Gallardo (2) –siete inicial–. Mateo Pallas (ps), Brais González (2), Thymann (10, 5p), Toth (1), Arón Díaz, Quintas, Rubén Río (1), Azurmendi y Essam.
Helvetia Anaitasuna Marcos Cancio, Xavi González (4,3p), Alonso Moreno (5), Samu Pereiro (2), Aitor García (2), Pablo Itoiz (1) y Martín Ganuza (5) –siete inicial–. Santamaría (ps), Albizu (3), Marco Moreno (3), Zungri (2), Kisselev (2), Pablo Castro y Julen Elustondo (1).
Marcador cada cinco minutos 4-1, 6-4, 8-7, 11-10, 12-13, 14-16 (descanso); 16-19, 20-22, 23-25, 25-26, 28-28 y 30-30.
Árbitros Macías de Paz y Ruiz Vergara (Comité Andaluz). Excluyeron a Julen Elustondo y Zungri por parte del Anaitasuna.
Pabellón Municipal de O Gatañal.
El Helvetia Anaitasuna puso fin este domingo a la primera vuelta y al año con un empate en Cangas (30-30) que le permite sumar después de tres derrotas consecutivas e irse al largo parón que se avecina ahora con 8 puntos en el marcador, dos por encima del descenso, aunque en el puesto de promoción.
Que sumar siempre es positivo es una evidencia, pero quizá quedó la sensación de que el equipo navarro podía haberse traído la victoria de tierras gallegas tal y como transcurrió el partido. Y es que el Frigoríficos del Morrazo acabó por rescatar un punto de oro, si bien en un encuentro en el que la peor noticia para el conjunto gallego fue la lesión de su portero titular, Jorge Pérez.
Fue, sin embargo, su compañero Mateo Pallas –con 9 paradas en 27 minutos– uno de los artífices de que el Frigoríficos lograse remontar una desventaja de tres goles en la segunda parte. Entre él y el lateral danés Mads Thymann –10 goles– acercaron al equipo gallego, que con una gran defensa evitaron el gol de Anaitasuna en el último ataque.
El equipo navarro, que tuvo a Alonso Moreno y a Martín Ganuza como sus máximos artilleros –con cinco dianas cada uno– se sobrepuso a un mal inicio de partido (6-2, min.7) después de un tiempo muerto de su entrenador, Quique Domínguez. Ajustó su defensa en la zona central y eso generó dudas al ataque posicional del Frigoríficos, que multiplicó sus pérdidas, lo que facilitó goles rápidos en transición del rival.
Con un parcial de 2-8 en nueve minutos, el Helvetia Anaitasuna tomó el mando del encuentro y ya no lo perdería en ningún momento. Nacho Moyano buscó soluciones en su banquillo, pero no las encontró. Los navarros jugaban con cómodas rentas en el electrónico (15-18, 20-23, 21-24) pese a que Mateo Pallas tocó muchos balones desde que entró por el lesionado Jorge Pérez.
Anaitasuna tenía el partido controlado, pero era incapaz de romperlo. Y los errores de Santi López penalizaban al Frigoríficos, incapaz de culminar su remontada. A pesar de ello, con Thymann muy efectivo desde los siete metros, logró rescatar un punto de oro ante un rival directo por la permanencia, que dispuso de un último ataque para ganar cuando el marcador reflejaba un 30-30, pero no se materializó.