El portero navarro Sergey Hernández guió este domingo al Magdeburgo, con 18 paradas y un 44% de eficacia, a la quinta Liga de Campeones de su historia con un triunfo ante el Füchse Berlín (26-32) en la final disputada en el Lanxess Arena. El Magdeburgo, que eliminó al Barça en semifinales (30-31), alcanzó su quinto cetro europeo tras los conquistados en 1978, 1981, 2002 y 2023.
Aunque casi todos coincidieron en señalar que el guardameta debería haber sido elegido como MVP de la fase final, lo cierto es que los organizadores optaron por un jugador de pista, el islandés Kristjansson, escudándose en que Sergey tuvo pocos minutos en la semifinal contra el Barcelona. En cualquier caso, el navarro pudo tener una dedicatoria especial. “¿De quién se ha acordado nada más terminar el partido”, le preguntaron en zona mixta. Y la respuesta le salió del alma: “De mi padre, al que perdí cuando tenía 18 años”. Ahora, con casi 30 ( los cumple mañana martes, 17 de junio), Sergey se convierte en campeón de la máxima competición continental, pues en 2022 ya conquistó la Liga Europea de la EHF con el Benfica portugués, su anterior equipo.
El portero navarro dedicó su éxito de esta manera tan emotiva a su padre, José Luis Hernández, reputado atleta y después preparador de deportistas que falleció en 2014.
En lo que respecta al partido de este domingo, la final entre equipos alemanes comenzó eléctrica, con el Füchse golpeando en primer lugar (5-3, min.8). aunque el Magdeburgo, que encontró en el talento del recuperado Gisli Kristjansson su motor ofensivo, no tardó en voltear el marcador (6-8, min. 14) y termino marchándose al descanso con una ventaja considerable (12-16).
Ni el paso por vestuarios ni la expulsión directa de Serradilla lograron despertar al Füchse Berlín, visiblemente tocado anímicamente ante la inspiración de Sergey Hernández, infranqueable bajo palos, y la contundencia ofensiva de Magnusson, letal tanto en la finalización como en la distribución. El islandés lideró un nuevo estirón del Magdeburgo hasta alcanzar la máxima diferencia (17-23, min. 42).
El reloj corría en contra de los berlineses y su técnico, Jaron Siewert, no lograba encontrar la fórmula para frenar el vendaval rival. Ni siquiera el talento de Mathias Gidsel, brillante una vez más, bastaba para mantener con vida al Füchse. Sus grietas en defensa resultaron insalvables y el marcador seguía sin dar síntomas de remontada (24-28, min. 51). La clave del encuentro estuvo en la defensa. El Magdeburgo se mostró como un bloque rocoso, solidario en cada acción, y además apoyado por un Sergey Hernández descomunal. “Estoy muy orgulloso del equipo”, resumió el navarro, campeón de Europa. En el nombre del padre. – Efe/J.L.
Polémica
Queja del barça por el arbitraje y derrota con el Nantes (30-25). El Barça trasladó ayer una queja formal a la EHF por el arbitraje de los macedonios Slave Nikolov y Gjorgji Nachevski en la semifinal de la Liga de Campeones que los azulgrana perdieron el sábado con el Magdeburgo (30-31). Así lo confirmó ayer domingo en Colonia el coordinador deportivo de la sección de balonmano del Barcelona, Joan Marín, tras perder con el Nantes por el tercer puesto (30-25). El Barcelona acabó su semifinal con cuatro jugadores de campo en pista por las expulsiones de Jonathan Carlsbogrd y Aitor Ariño, a las que se sumó otra roja muy discutida a Thiagus Petrus en la primera parte.
Füchse Berlín 26
Magdeburgo 32
FÜCHSE BERLÍN Milosavljev; Litchlein (3), Andersson (1), Marsenic (2), Freihofer (5, 4p), Gidsel (7) y Hav Teigum (7) –siete inicial–; Wiede, Darj, Prantner, Strlek, Langhoff (1), Beneke, Grüner, Herburger y Ludwig (p.s).
MAGDEBURGO Sergey Hernández; Mertens (2), Claar (6), Kristjansson (8), Magnusson (6, 5p), Petterson (3) y Saugstrup (3) –siete inicial–; Zechel, Serradilla (1), Hornke, Weber (1), Lagergren (2), O’Sullivan, Damgaard y Bergendahl y Portner (p.s).
Marcador cada cinco minutos 2-2, 5-4, 7-8, 9-11, 11-14 y 12-16 (descanso); 14-17, 17-21, 19-24, 23-27, 26-30 y 26-32.
Árbitro Bojan Lah y David Sok (Eslovenia). Excluyeron a Max Darj (min. 17), Mijajlo Marsenic (min. 24 y min. 37) y Tim Freihöfer (min.35), por parte del Füchse Berlín; y a Felix Claar (min. 14) y Antonio Serradilla (min. 29), por parte del Magdeburgo. Mostraron tarjeta roja a Antonio Serradilla (min. 33), por parte del Magdeburgo.
Pabellón Lanxess Arena de Colonia (Alemania). Unos 20.000 espectadores. Final de la Liga de Campeones.