Las redes arden contra el empresario que robó a un niño la gorra de un tenista

En las últimas horas un reconocido empresario ha sido muy criticado por dejar sin la gorra de su ídolo a un niño. Tras el partido del US Open entre Khachanov y Majchrzak, un hombre le arrebató el regalo del tenista polaco, que se impuso a su rival, número 9 del mundo.

En el vídeo se observa cómo Kamil Majchrzak, actual número 76 del ranking ATP, firmaba autógrafos a los aficionados. En un momento dado, se quitó la gorra y se la entregó al menor, pero antes de que pudiera cogerla, un hombre que estaba junto a él se adelantó y se la quitó de las manos antes de que pudiera reaccionar.

El jugador no se dio cuenta de lo ocurrido, pero las imágenes rápidamente corrieron como la pólvora por redes sociales, generando una gran indignación. Posteriormente, el deportista se pronunció en sus redes, pidiendo colaboración para localizar al menor y entregarle otra gorra.

Final feliz para el menor

El individuo, muy criticado en redes, es Piotr Szczerek, director ejecutivo de la empresa de pavimentación Drogbruk.

Según se ha comentado, tras quedarse con la gorra la guardó en el bolso de su acompañante, mientras el niño quedaba visiblemente decepcionado.

Gracias a la repercusión en Internet y al mensaje del tenista, el menor pudo reencontrarse con él poco después y recibir un nuevo obsequio. El propio Majchrzak celebró el desenlace escribiendo: "Estoy impresionado con el poder de internet. ¡Lo conseguimos! Todo solucionado".

Criticada disculpa

Piotr Szczerek publicó este lunes una disculpa en redes sociales que no ha dejado indiferente a nadie.

El empresario, directivo y director general de la compañía polaca, utilizó la cuenta de Instagram de su empresa para compartir un largo mensaje donde reconoció que había cometido "un grave error" y aseguró que, después del incidente, devolvió la gorra a Brock.

Asimismo, en su cuenta personal pidió que no se convirtiera el asunto en un escándalo global: "Entiendo que a algunas personas no les guste esto, pero, por favor, no hagamos un drama mundial por una gorra".

En su publicación, además, lanzó una advertencia a quienes le han criticado duramente: "En cuanto al odio en Internet, me gustaría recordar que insultar a una figura pública implica responsabilidad legal. Todos los comentarios ofensivos, difamaciones o insinuaciones serán analizados para valorar posibles acciones judiciales”.

Lejos de apaciguar los ánimos, su mensaje volvió a generar rechazo entre numerosos usuarios, y muchos señalaron que el post resultaba incluso más vergonzoso que quitarle la gorra al niño.