La docuserie de Pedro Sánchez está en venta. De momento no hay distribuidora para ‘Moncloa’, que muestra al presidente del Gobierno español en sus quehaceres diarios. Así, podemos verle desayunando con su esposa Begoña, conversando con sus padres o manteniendo charlas informales con ministros en los consejos.

La serie al completo está financiada por iniciativa privada de las productoras Secuoya y The Pool, y no tiene como objetivo emitirse en ninguna cadena pública, afirman sus creadores, que buscan como potenciales clientes a plataformas en streaming como Netflix, la cual, a pesar de algunos rumores, no ha mostrado aún interés.

“Sí podemos adelantar que distribuidoras internacionales como Beta Films han mostrado su interés por esta serie documental. Este proyecto tiene vocación de terminar en un canal o plataforma privada, un proyecto que se financia conjuntamente entre las dos productoras que hemos decidido embarcarnos en esta aventura”, declaró Eduardo Escorial, productor de Secuoya Studios, en la presentación de Moncloa.

La serie se divide en seis segmentos: en ellos se abordán la historia del edificio, sus protocolos, la de los distintos departamentos y empleados (algunos presentes desde el gobierno de Adolfo Suárez), la coordinación de la cumbre de la OTAN, la gestión de la guerra de Ucrania, la vida personal del presidente y los Consejos de Ministros. De la misma manera, algunos de los instantes más destacados incluirán al presidente español conversando con líderes internacionales como Emmanuel Macron, Ursula Von der Leyen, Boris Johnson o Joe Biden, con quién compartió bromas durante la visita del presidente estadounidense a España en la cumbre de la OTAN.

Escorial afirmó haber encontrado un trato “cercano” y “afable” tanto por parte de la institución como del presidente, del que dijo que “ya tiene tablas” a la vez que calificó la concesión del organismo, que dejó entrar a grabar a un grupo “muy muy reducido”, como “una labor de transparencia”.

El límite fueron sus hijas

Durante el rodaje, Sánchez fue un personaje más y sólo se puso una línea roja por parte de la presidencia: respetar la intimidad de sus hijas. Asimismo, el equipo también encontró limitaciones por motivos de seguridad a la hora de grabar los Consejos de Ministros y la cena de presidentes en la OTAN. A pesar de ello, el director de la docuserie, Curro Sánchez, precisó que “no hay ningún tipo de decisión de controlar el contenido por parte de Moncloa”, que les puso al tanto de los eventos más destacados en la agenda.

“Para nosotros todos los temas de partido, PSOE y demás, no nos interesan, porque nos alejan de lo que queremos contar”, apuntó Sánchez, quien insistió en que el objetivo del documental es ser un retrato de la institución y su historia, en la que “la presencia del presidente no destacará más que la de otros trabajadores que también hacen labores muy importantes”.