Etura, Tosar y Resines presentan en Tudela el "fenómeno" "Celda 211"
ES EL SEGUNDO FILMe DE LA XIV MUESTRA DE CINE ESPAÑOLCoincidieron en que "no se esperaban el éxito en los Goya", aunque sabían que la historia era "muy buena"
tudela. Con el calificativo de "fénomeno" presentó ayer la película Celda 211, Luis Alegre, organizador del la XVI Muestra de Cine Español que ayer vivió la segunda de sus cinco jornadas en Tudela. Apesar del éxito arrollador en los últimos Goya, de la tardía pero clara aceptación de la crítica y del éxito rotundo en taquilla si hay algo en lo que coincidieron los actores Marta Etura, Antonio Resines y Luis Tosar fue en que ninguno de ellos se esperaba lo que ha ocurrido en torno a esta producción. Para Resines, tras la primera lectura del guión sintió "como un pálpito que había que sacar decentemente adelante", Tosar sin embargo creyó tener "una historia muy buena entre manos" y a Etura, la primera lectura "le atrapó desde el primer momento, desde la página cinco, porque no paran de suceder cosas".
Otra de las claves del éxito que los tres remarcaron fue capacidad de Daniel Monzón para dirigir al equipo, que contó con un centenar de personas (entre profesionales y extras) entre los que también se incluían reclusos. Una de las dificultades para coordinar a todo el equipo que configuraba el motín fue "el acoplarse, tanto el profesional con el no profesional, o el creativo del que no lo es tanto. Pero después de la semana resultó todo muy fácil", explicó Tosar. "Si esto lo tienes que rodar con figuración profesional en Madrid o en Barcelona hubiera costado mucho más porque es otra actitud. Era muy curioso porque al final se fueron haciendo con la cárcel abandonada y ellos mismos las tenían atrezadas", continuó.
Etura reconoció no haber vivido de cerca ese ambiente de rodaje porque le tocaron las escenas "externas" pero que sin embargo, si que percibió "que todo el mundo estaba muy por la labor".
Por su parte, Tosar también detalló cómo logró acercarse a su personaje, el líder de patio Malamadre de una hipotética cárcel de Zamora. "Fue un proceso muy divertido. Todo el humor y la acidez del personaje venía dada por el guión solo había que ponerle un poco más. Hicimos un recorrido por centros penitenciarios para conocer a la mayor gente posible, no sólo reclusos sino también funcionarios, era una fuente valiosísima porque tienen una visión más objetiva de la del recluso. Fuimos encontrando Malamadres por ahí, ese tipo de gente que se ha mantenido como jefes, aunque ya no quedan muchos, es una especie en extinción".
el reconocimiento Los actores estuvieron de acuerdo en que los Goya están alcanzando cada año mayor repercusión. En este sentido, Resines señaló que "la gente ya sabe quién ha ganado un Goya, ahora es un premio que tiene cierta categoría que no se lo dan a cualquiera". También destacaron que un Goya incide sobre todo en la taquilla pero mostraron sus dudas sobre si este galardón contribuye a que les lleguen más papeles. "El Goya es una alegría importantísima, ayuda a que las películas se vean un poco más, es un reconocimiento fantástico, pero a nivel profesional me da la impresión de que no afecta", expresó Tosar. Mientras que para Etura el premio "ni te da más trabajo ni te hace mejor actor, creo que ganarlo es sobre todo importante a nivel de película".