mérida. El actor valenciano Antonio Valero cree que parte del éxito de series como Amar en Tiempos Revueltos y Cuéntame cómo pasó radica en que muchas personas se ven reflejadas en ellas y afirmó que, después de 30 años de democracia, hay que empezar "a revisar un poco nuestra historia y nuestro pasado".
En una entrevista a Efe, con motivo de su presencia en el Festival de Mérida, Valero definió su papel de Salvador Pantoja en Electra como una "especie de integrista religioso que utiliza la religión como arma de poder y sojuzgación de las personas".
Pantoja "meterá a Electra en un convento para convertirla en un ángel vivo" y aunque el actor cree "en la espiritualidad", piensa que la Iglesia "acaba siendo algo sectario que entra dentro de la conciencia del individuo", lo cual "no es permisible".
Valero abogó por despertar la memoria ya que, a su juicio, "quien pierde la memoria pierde su identidad" y estimó que, después de 30 años de democracia, conviene "revisar un poco nuestra historia y nuestro pasado".
Una historia, la de la Guerra Civil española y el franquismo, que han llevado a la pantalla las exitosas series Amar en Tiempos Revueltos o Cuéntame cómo pasó donde Valero ha encarnado a Hipólito Roldán y Diego Barros, respectivamente.
"En el franquismo no se podía hablar de lo que había ocurrido porque había mucho dolor y estaba la herida abierta", señaló este valenciano que forma parte del elenco de actores que estrenará la versión teatral de Amar en Tiempos Revueltos el próximo 16 de septiembre en Zaragoza.
De una dilatada trayectoria profesional en cine, teatro y televisión, se define como "un cuatro por cuatro" de la interpretación y recomienda "no hablar a la juventud demasiado de la suerte sino del esfuerzo, preparación y voluntad".
En este sentido, dijo que en la televisión habrá siempre "frivolidad y bodeville", pero que "las cadenas deberían tener un poco más de compromiso a la hora de hacer guiones que sean educativos y pedagógicos para la juventud".
En este punto nombra a su hija de diez años a la que, a veces, aconseja "cambiar de canal" con ciertas series de televisión "juveniles"; aunque, no por ello, rechaza el "entretenimiento, la risa y el ingenio", especialmente balsámico en una época de crisis.
Además, guarda unos recuerdos "absolutamente maravillosos" de su primera película, La mitad del cielo, junto a Ángela Molina y Fernando Fernán Gómez, y de su primera incursión televisiva con La forja de un rebelde, dirigida por Mario Camus.
"Es mi padre cinematográfico" aseguró el intérprete, para el que Camus es "uno de los grandes directores europeos" como avala su aclamada Los santos inocentes.
Valero no comparte la idea de que "cualquier tiempo pasado fue mejor", para él, la "sociedad ha progresado muchísimo"; sin embargo, subrayó que "una vez cubierta una necesidad se crea otra y debemos ser progresistas en el sentido de ir a más y a mejor".