ARTICA. La formación Vocalia Taldea se proclamó ayer ganadora indiscutible del II Certamen Estatas de Coros A Capella que se inició el pasado viernes y se ha celebrado durante todo el fin de semana con las actuaciones de cinco corales. El grupo, formado por una veintena de chicas de la CAV, consiguió el Premio del público, el premio al Mejor Director para Basilio Astulez, el Gran Premio A capella, y el primer premio en las modalidades de Polifonía y Folclore. Al término del certamen, conducido por las periodistas Beatriz Ariño y Txari Eleta, el director de Vocalia Taldea, Basilio Astulez, se mostró visiblemente emocionado. "Siento una alegría enorme. Es un empujón para las chicas y el mejor reconocimiento a tantas horas de trabajo", confesó el cabeza del grupo mientras planeaba las próximas actuaciones.
Tras una década de trabajo, viajes y horas incontables de ensayo en Vitoria, el conjunto compuesto íntegramente por mujeres deleitó a los asistentes que se congregaron en la Casa de Cultura María de Maeztu de Artica para conocer el veredicto final del jurado tras dos días de actuaciones. El jurado, compuesto por Igor Ijurra, Dante Andreo y José Manuel Tife, coincidió en galardonar a las chicas de Vocalia Taldea por el tesón demostrado a lo largo de sus diez años de andadura. No obstante, el avance de Internet y las nuevas tecnologías, permitió al grupo de la CAV una mayor organización y facilidad que culminó en la culminación de ocho horas de ensayo un solo domigo al mes.
Desde las Islas Canarias desembarcaron los grupos Cámara Ainur y el Coro polifónico universitario de La Laguna. El primero, coordinado por Mariola Rodríguez, se impuso en la categoría de Polifonía donde ganó el tercer premio y el segundo en la modalidad de Folclore, dotado con 2.000 euros. Formado por 19 personas de edades comprendidas entre los 23 y los 50 años, Rodríguez puso de manifiesto las "dificultades que conlleva la coordinación y concentración de tanta gente, más aún al no disponer de un local para ensayar", Tras cinco años de trabajo, "seguimos ensayando en la cocina de casa de mi madre, pero compensa", aseguró la directora de Ainur tras participar en concursos de Ejea, Nojales y Dinamarca.
Otro de los protagonistas del encuentro fue Benito Goñi, diseñador de las estatuillas y del diapasón que sirve de símbolo al certamen. El autor confesó que sendos emblemas "se trata de obras realizadas en barro cocido que aspiran a retratar el significado de la música". En el mismo sentido, Goñi aclaró que el galardón de menor tamaño "es la recreación de un coro sobre un frontón". Una seña de innovación que Goñi imprimió además sobre el cartel anunciador. "Un efecto óptico que juega con planos azules de cristales y blancos de partituras", argumentó el diseñador.
Frente a las tres bazas ganadoras, grupos como Voces Blancas José de Felipe, procedentes de la Comunidad de Madrid y Ars Poliphonica desde Cantabria obtuvieron resultados más modestos tanto por parte del público como del jurado que no los contempló en su fallo.