Pamplona. La Sinfonietta Académica celebró ayer su vigésimo aniversario con un concierto de música clásica alegre y popular en la iglesia de los padres Carmelitas de Pamplona, que se llenó de aficionados. La orquesta, bajo la batuta de Caroline Collier, ofreció un recital que comenzó a las 20.00 horas y contó con partituras de Mendelssohn, Sibelius o Rachmaninov. Además, los asistentes pudieron disfrutar de la Romance en Fa mayor, de Beethoven, tocada con arte por la violinista Catalin Bucataru. Foto: Unai beroiz