'Colectiva 1953-2012': Rosa Valverde y la vida transformada en arte
el pabellón de mixtos acoge las más de 230 obras de la artista donostiarra hasta el 4 de noviembre
pamplona. La primera planta del Pabellón de Mixtos de la Ciudadela acoge desde ayer y hasta el próximo día 4 de octubre la exposición denominada Colectiva 1953-2012, de la artista donostiarra Rosa Valverde.
La muestra, que cuenta con más de 230 piezas, ofrece un recorrido vital, no cronológico, por la obra de esta "poliédrica" creadora, como así la definió Álvaro Matxinbarrena, comisario de la exposición que, junto al concejal de Cultura Fermín Alonso, acompañó ayer a la artista en la presentación de tan manga colección.
La panorámica de casi 50 años de trayectoria es variada y se presenta desde dos puntos de vista: por un lado hay una multitud de soportes, pinturas, dibujos, grabados, collages, jaulas, cajas de arte, figuras, e instalaciones; y, por otro, la muestra recorre todas las etapas creativas de Valverde, una autora que ha dedicado toda su vida a la creatividad plástica. Al margen de una breve introducción, Valverde, entre emocionada y nerviosa, delegó en Matxinbarrena la descripción tanto de su carrera artística como de la propia exposición. "Rosa puso el título de Colectiva a la exposición porque Rosa son muchas Rosas, es muy poliédrica; en este sentido, el título no hace referencia al conjunto de artistas (Chillida, Oteiza, Mitxelena) que le han rodeado a lo largo de su vida. Ella, que siempre ha tenido mucho criterio, si ha tenido alguna influencia, ha sido la de sus padres. Rosa, con una acusada personalidad y siendo mujer, fue un caso excepcional en aquella época, en la que formó parte de un grupo de artistas (Ameztoy, Llanos, Nagel, Zurriarrain), todo hombres, que demostraron una verdadera fascinación por su obra. Pero quizá este tema ha sido un handicap en su carrera, ya que en ocasiones parece que los artistas se montan encima de las artistas, y eso toca un poco las narices".
En cuanto a su obra y a su personalidad, Matxinbarrena destacó que "Rosa no es solo pintora, Rosa es una artista total, llena de imágenes, versátil, poderosa, delicada, bestia y excesiva. Y es que el mundo artístico de Rosa es muy rico, ya que compone continuamente. Para bien o para mal, distingue de una manera muy relativa la profesión de la vida, para ella está todo unido. Si el mundo del arte fuera una cordillera, ella sería una de sus montañas; una montaña que cuenta con bosques frondosos, laderas amables, acantilados... Lugares por los que ha pasado a lo largo de su vida y que configuran su discurso". Con más de 230 obras expuestas, el comisario de la muestra apuntó que semejante "aglomeración es a propósito, no es que pretenda enseñar todo. Simplemente es mostrar realmente hasta dónde llega el trabajo de Rosa: los detalles, el romanticismo... Es capaz de ahorcar una rosa negra y, a su vez, crear la bailarina más delicada".
"Esta es una exposición, principalmente, para ojos no profanos, ya que estos apreciarán mejor los miles de guiños, ya que ella trabaja desde la ingenuidad, desde lo erudito, el humor y la ironía. Por lo tanto, en estas obras no se pueden aplicar los méritos académicos del cómo dibujo o dejo de dibujar. Rosa es una artista poderosa, muy brillante, de rango internacional", resaltó Matxinbarrena, quien destacó que lo importante es saber mirar una muestra que no presenta un recorrido cronológico: "No hay orden; solo un panel dedicado a su familia y otro a un taller con Sistiaga que le marcó en su infancia. El resto de las obras sería difícil fecharlas, porque no queríamos eso; las obras son iguales las de hace diez años y las de ahora".
La muestra individual que presenta Rosa Valverde en Pamplona hace el número 25 de su carrera tras Bilbao, San Sebastián, Pamplona, Roncesvalles o Irún. Además, ha participado en 13 exposiciones colectivas en el Estado, Francia o Italia, desde 1975. Cuenta con obra suya en la colección de Museo Gustavo de Maeztu de Estella.