Síguenos en redes sociales:

Viaje a las tierras del toro bravo

55 socios del Club Taurino de Pamplona viajaron en el puente foral a a sevilla para visitar varias ganaderías

Viaje a las tierras del toro bravoCedida

PAMPLONA. Día 1 de diciembre, sábado de 2.012: Son las seis y media de la mañana y los andenes de la estación del tren de Pamplona están abarrotados de personas esperando la llegada del Altaria, un tren con destino a Madrid.

Entre los asistentes, un nutrido grupo compuesto por 55 personas socios del Club Taurino de Pamplona, que se disponen a viajar a Sevilla, excursión tradicional que se realiza en las fechas del llamado "puente Foral" para visitar varias ganaderías de reses bravas. Como en muchas otras ocasiones, Sevilla sirvió de cuartel general para la expedición, donde desde el céntrico hotel Plaza de Armas, cada mañana salía el grupo en un autobús rumbo a la ganadería programada para visitar en el día.

Como suele ser habitual nos esperaban muchas horas para hacer risas y amistades, en buen ambiente y, sobre todo la posibilidad de perderse cada noche por las calles de Sevilla.

En esta ocasión los excursionistas tuvimos la oportunidad de visitar las ganaderías de Jandilla, El Parralejo, Javier Molina y Miura.

Día 2, Jandilla Fue la ganadería de Jandilla la primera visita que los excursionista del Club Taurino de Pamplona visitaron el día 2 de diciembre, siendo también el trayecto más largo de las cuatro que estaban previstas. La finca Don Tello, donde pastan los toros (solo machos) del ganadero Borja Domecq Solís, está situada en el término de la localidad de Mérida.

Una vez en la finca y montados en el consabido remolque, el tractor nos transportó por varios caminos y cercados, donde los expedicionarios pudimos ver varias camadas de toros preparados para ser lidiados en la próxima temporada del año entrante.

Después del recorrido por la finca de casi dos horas de duración, se hizo una visita a la casa museo, donde el ganadero tiene varias cabezas de toros, así como numerosos carteles antiguos y fotografías. Una de las cosas que más llamo la atención fue la colección de cencerros que colgados del techo figuran por orden de mayor a menor, cencerros que fueron utilizados por los cabestros en el año 1929, cuando su antepasado el Duque de Veragua trasladó al ganado por caminos y cañadas desde Toledo a Jerez.

Después de tomar un vino en la casa museo (obsequio del ganadero) nos trasladamos a la ciudad romana de Mérida, para comer en un restaurante hotel.

Día 3, El Parralejo El Parralejo, es una finca situada en la localidad de Zufre (Huelva) finca, donde ya llegaron a pastar toros de otras ganaderías en épocas pasadas como la del ganadero Gabriel Rojas. Es ahí, donde su propietario actual José Moya Sanabria, (a la sazón, casado con una hija de Borja Domecq) mantiene y pastan los novillos de la ganadería que se formó (según se dice) en el salón de la plaza de toros de Pamplona en los Sanfermines del año 2.006, de acuerdo con su propietario y los ganaderos de Jandilla y Fuente Ymbro.

En esta finca y a través de un cercado, los excursionistas pudimos ver los novillos que se van a lidiar el día 5 de julio en la plaza de toros como preludio de los Sanfermines de 2013.

Después de ver una amplia camada de novillos, (en esta finca solo tienen novillos) el torero navarro Francisco Marco que venía como invitado, se encargó de tentar tres vacas que el ganadero tenía preparadas.

La primera vaca fue de una calidad excelente, y fue la que mejor nota obtuvo por su buen comportamiento tanto en el peto del caballo como en la muleta. Esta erala resultó brava, de gran nobleza y con mucha clase, acudía con prontitud a los engaños que Francisco Marco le ofreció tanto por el pitón derecho como por el izquierdo. La segunda de menos calidad pero también buena, y menos buena la tercera. El torero se hinchó de torear mucho y bien, siendo aplaudido por los excursionistas en cada actuación y felicitado por el ganadero.

Día 5, Javier Molina En la localidad de Villanueva del Río y Minas (Sevilla) pastan los novillos de Javier Molina en la finca llamada, El Sardinero.

En esta finca de 800 hectáreas, hay unas 300 vacas, así como unos 40 novillos preparados para ser lidiados durante la temporada entrante. Todos ellos también de procedencia Jandilla y Fuente Ymbro.

Dos caballistas y una parada de bueyes llevaron a los novillos a un cercado, donde los asistentes tuvimos la oportunidad de verlos de cerca, y poder sacar las consabidas fotos de rigor.

También en esta finca, el ganadero tenía tres vacas para ser tentadas, vacas, que no fueron del agrado ni del ganadero ni de los toreros, ya que salieron mansas y complicadas. A este tentadero, además de Francisco Marco acudió el matador de toros Salvador Cortés, que se alternaron indistintamente en el transcurso de las tres eralas tanto a la hora de llevarlas al caballo como con la muleta. También acudieron otros aspirantes al arte de Cuchares, que les tocó hacer tapia y que apenas pudieron torear, pues tanto Francisco Marco, como Salvador Cortés dejaban las vacas completamente agotadas y sin fuerza.

Día 6, Miura El jueves día 6 se visitó la ganadería de Miura, siempre es una expectación entrar a la finca de Zahariche donde pastan los míticos toros. Toros que han escrito páginas de gloria y también de dolor a lo largo de la historia. En remolques, los asistentes pudimos ver muy de cerca la estampa de unos toros cuya leyenda crece aún más observándolos en su hábitat natural. Toda la visita fue atentamente dirigida por los propietarios del hierro: Eduardo y Antonio Miura

El presidente del club Juanito Ganuza, entregó a los ganaderos como recuerdo de la visita, una foto de gran tamaño enmarcada, donde contempla un caserío fruto de sus orígenes. Otro socio, también les llevó tres fotografías de gran tamaño donde se aprecian épocas pasadas de esta ganadería.

Después de las fotos de rigor, tanto dentro de la finca como en la puerta de entrada donde presiden dos calaveras, la expedición se dirigió a la localidad de Carmona para comer en el restaurante El Tentaero donde acompañados de un grupo rumbero, no falto la alegría y el buen humor entre todos los asistentes.

Visita a la taberna de Quitapesares Uno de los momentos más emotivos del viaje fue, la visita que todos los socios del club hizo a la taberna Quitapesares para hacer un homenaje a, José Pérez Blanco Perejil, que falleció a principios del 2012.

Como se sabe, Perejil fue desde hace décadas amigo de numerosos socios del club Taurino, magnifico cantaor, aficionado a los toros (fue un gran seguidor de Curro Romero) y una de las personas más populares de Sevilla.

En la actualidad, su hijo Álvaro se ha hecho cargo del local, donde el muchacho es un clon de su padre. A María, la esposa de Perejil se le entregó una revista del club donde viene un in memoriam dedicado a su marido, y se le colocó un pañuelico rojo como muestra de amistad y de recuerdo.

La organización ha funcionado con precisión y el regreso se hace con una mezcla de pena. El toro bravo sigue pastando en el sur y ver de cerca a este bello y noble animal es como si colmara un sueño.