Mikel Iriarte y Fermín Bernetxea graban el disco 'Sorterria'

pamplona. El tenor Mikel Iriarte y el pianista Fermín Bernetxea acaban de realizar la grabación de un CD de canción lírica que se titula Sorterria (La tierra natal). Han colaborado también la soprano Ariadna Martínez y la contralto Elena Balanuta. Son cinco canciones en euskera, ocho en castellano y un regalo del pianista incluyendo dos obras de Aita Donostia en su parte final.

Las letras de las canciones son poesías de Ana Akhmátova, Vladimir Bashev, Joseba Sarrionandia, José Antonio Asenjo, Mercedes Viñuela y Gaudencio Remón Berrade. Las traducciones de varias de ellas han corrido a cargo de Mª Teresa León, Tania Armentia y Xanti Begiristain Madotz. Y los compositores que han puesto música a dichos poemas son Tania Armentia, Félix Sierra, José Antonio Asenjo, Pedro José Zazpe, Francisco Javier Navascues Zamora y Mikel Iriarte. La mayoría de ellos son catedráticos e imparten clases en distintos conservatorios del Estado.

La música más contemporánea del CD ha sido escrita por Pedro José Zazpe. Está llena de disonancias, pero "tan bien puestas, que escucharlas supone una caricia tras otra para nuestro oído, convirtiendo su audición en un verdadero deleite de sublimes sensaciones", explica Iriarte. Por su parte, Félix Sierra explica su experiencia en este proyecto: "Cuando en el verano del 2010 Mikel Iriarte me propone escribir la música para cuatro poemas, con la intención de incluirlos en un próximo trabajo suyo, acepto sin dudarlo. Con anterioridad, acompañado por la pianista, prematuramente fallecida, Tatiana Kriukova, me había dado la gran satisfacción de grabar tres canciones de las que soy autor". Respecto a su modo de trabajar en este caso, Sierra comenta que leyó detenidamente los poemas que debía musical "sin demasiada reflexión", ya que está "convencido" de que "el sentimiento tiene canales distintos al entendimiento".

Sorterria ha sido concebido como un disco sin ánimo de lucro e Iriarte regalará entre sus allegados 200 de las 500 copias editadas. "Los otros 300 se han donado a la Fundación Gizakia Herritar para su comedor social París 365, con el fin de que sean vendidos en su mercadillo", cuenta el tenor.