pamplona - Luisillo Kalandraka (bajo y coros), Javiero Etxeberria (guitarra y voz), Pello Repáraz (trombón y voz), Rubén Antón (trompeta y coros) y Enrikko Rubiños (batería), es decir, Vendetta, ofrecieron ayer su último concierto. Un cita con la historia musical de Euskal Herria que se desarrolló en loor de multitudes, ya que más de 5.000 personas acudieron a la despedida del grupo, algunas de las cuales aguardaban poder entrar a la carpa desde las 15.00 horas.
El grupo navarro ofreció un concierto muy especial, como la cita lo requería, que se alargó bastante más allá de las dos horas, y para el que contaron con un nutrido grupos de músicos invitados. Los cinco discos del grupo estuvieron presentes a través de diferentes canciones, y también sonaron, cómo no, sus grandes éxitos.
En definitiva, un adiós se sabe a tristeza pero respira honestidad y coherencia por los cuatro costados. - D.N.
