...la escuadra de la expedición que dio la primera vuelta al mundo salió de Sevilla rumbo a las islas Molucas, conocidas como las de las Especias, que se sitúan en el océano Pacífico.

Así lo relató Antonio de Pigafetta, cronista oficial del viaje que en su narración ni siquiera citó al marino de Getaria Juan Sebastián Elcano, que culminó el viaje. Probablemente, tal y como mantiene el catedrático de la Universidad de Sevilla Pablo Emilio Pérez-Mallaina, esto se debe a que el marino vasco fue uno de los hombres que se levantó contra el capitán general de la expedición, Fernando de Magallanes, en el motín de los capitanes que tuvo lugar en San Julián (Argentina) -a finales de marzo de 1520, al no encontrar un paso entre el Atlántico y el Pacífico, los máximos responsables de las naos se encararon al portugués-.

No obstante, ni el cronista oficial -hubo otros como Ginés de Mafra que sí citan a Elcano en sus narraciones- pudo acallar una evidencia: fue del de Getaria el que completó la primera circunnavegación, tras fallecer Magallanes en una escaramuza con una tribu local en la isla de Mactán, en Filipinas, y tras hacerse cargo de la nao Victoria -a Elcano le eligieron sus propios hombres para liderar la única de las cinco que llegó a Sanlúcar de Barrameda-. Para celebrar el quinto centenario del desembarco de los 18 marineros que sobrevivieron a un viaje -se embarcaron un total de 238- aún quedan tres años y apenas un mes.

las especias En 1519, tal y como ha ocurrido muchas veces en la historia, el mundo estaba dividido en dos potencias rivales: el reino de Castilla y Portugal. El Tratado de Tordesillas -1494-, según recuerda Stefan Zweig en Magallanes. El hombre y su gesta, marcó una línea longitudinal que se situó a 360 leguas al oeste de las islas de Cabo Verde. Todo lo que hubiese al oeste de esa línea pertenecía a Castilla; los mares del este, por lo tanto, correspondían a Portugal.

La expedición de Magallanes y Elcano no surgió como un proyecto para demostrar la redondez de la tierra -fue una consecuencia del viaje-, sino para llegar a las islas de la especiería sin atravesar mares portugueses y así poder transportar sin conflictos tan valiosa carga -las especias multiplicaban por 7.000 su valor en cuanto llegaban a Europa-.

Mientras la Victoria continuó navegando hacia el oeste desde Indonesia -sin tocar tierra durante cinco meses hasta llegar a Cabo Verde-, la Trinidad, la otra nave que llegó hasta las Molucas, intentó retornar hacia el este por el camino por el que habían venido, siguiendo el plan previsto -el tornaviaje lo descubriría décadas después otro vasco, Andrés de Urdaneta, que fue, además, uno de los tripulantes de la segunda expedición a las Molucas en la que falleció Elcano en 1526-.

No obstante, un problema en el casco hizo que se retrasasen para efectuar reparaciones y finalmente fueron capturados y aprisionados por portugueses que los descubrieron -Ginés de Mafra viajaba en esta nao-.

El navío comandado por Elcano llegó a Castilla con 700 quintales de especias, es decir, 32.200 kilos -un quintal equivale a 46 kilos-. El propio getariarra ganó 500.000 maravedíes por su carga, cinco veces más que el sueldo que tenía asignado.

inicio del viaje Aunque solo regresó la Victoria, fueron cinco los navíos que componían la escuadra: Como la Victoria -85 toneladas-, la Trinidad -110- y la San Antonio -120- eran de origen vasco, mientras que La concepción -90- era gallega y no se conoce dónde se construyó la Santiago -75-.

Si bien fue el 10 de agosto cuando las embarcaciones salieron del puerto de Sevilla, la expedición tardó mes y medio en iniciar el viaje hacia el Pacífico desde Sanlúcar de Barrameda -20 de septiembre-.

Elcano se sumó al expedición como maestre de la Concepción que comandaba el militar Gaspar de Quesada.

El marino gipuzcoano, nacido en 1487, pertenecía a una familia adinerada del municipio costero y con una gran vinculación al mar. Fue dueño de una embarcación que tuvo que vender a extranjeros para saldar una deuda, cuestión que le acarreó ciertos problemas debido a que la ley de la época impedía hacerlo.

Del total de 238 marineros que se embarcaron en el viaje, que en un inicio se estimó que duraría en torno a dos años -se aprovisionaron las naves con 500 toneladas de conservas-, el l4% eran vascos. Un tercio de la tripulación, por su parte, era extranjera: el propio Magallanes era portugués, y también viajaron tripulantes naturales de Francia, Inglaterra, Italia, Alemania o Grecia. La primera vuelta al mundo no pudo ser más internacional.

10 de agosto de 1519

Salida de Sevilla. - El 10 de agosto de 1519, lunes por la mañana, la escuadra, llevando a bordo todo lo necesario, así como su tripulación, compuesta de doscientos treinta y siete hombres, anunció su salida con una descarga de artillería, y se largó la vela de trinquete. Descendimos por el Betis hasta el puente de Guadalquivir, pasando cerca de San Juan de Alfarache, antiguamente ciudad de moros muy poblada, en la que había un puente, del que no quedan vestigios, excepto dos pilares bajo el agua y de ios que hay que guardarse, y para evitar el riesgo se debe navegar por este lugar con pilotos, aprovechando la marea alta.

(Extraído del diario del cronista del viaje, Antonio Pigafetta).