PAMPLONA - La Fundación Otazu ha celebrado este sábado la IV edición de ArtWeekend, una cita en la que arte y vino se fusionan. El momento central ha sido la presentación de la obra ganadora de la III Bienal de Arte Monumental de la Fundación Otazu 2020, que en esta edición ha recaído en Hans-Peter Feldmann (Düsseldorf, Alemania, 1941).

Esta es la primera pieza monumental del artista alemán en España y su propuesta ha sido escogida por un jurado internacional encabezado por Manuel Borja-Villel, director del Museo Reina Sofía de Madrid. La obra ganadora, titulada 'Tiempo', "relata el valor y la trascendencia de este elemento esencial en la vida cotidiana. Pero también en la naturaleza y la viña. El tiempo como espacio de lo impredecible".

"El hombre ha intentado a menudo describir el tiempo, para controlarlo, para comprender su significado y para interpretarlo. Sin embargo, cada propósito de parar o acelerar el tiempo ha resultado una tarea absolutamente imposible", explica Hans-Peter Feldmann en su propuesta para la Fundación Otazu.

En este caso, 'Tiempo' se materializa en un reloj de acero inoxidable de más de tres metros de diámetro con ambas caras vistas, insertado 50 centímetros por debajo de la tierra e inclinado. Hans-Peter Feldmann es uno de los grandes artistas conceptuales europeos y su universo es la vida cotidiana. Su obra forma parte, entre otras, de las colecciones del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), la Tate de Londres, el parisino Centre Pompidou y el Museo Reina Sofía (Madrid).

Asimismo, durante ArtWeekend4 se han presentado todos los proyectos que lleva a cabo la Fundación Otazu y que enlazan arte y vino. Estos son: 'Artist Series', de Alfredo Jaar, ganador de la primera edición del Premio Bienal de Arte Monumental de la Fundación Otazu; 'Genios de Otazu #2' con Pablo Armesto, que enmarca su obra dentro de un contexto que va desde la abstracción geométrica hacia la escultura más contemporánea; y la propuesta '1 ha', una historia, creada a partir de los trabajos fotográficos y audiovisuales de Jordi Bernadó.

Además, se ha presentado 'Vitral' de Otazu, la obra póstuma de Carlos Cruz-Díez. Se trata de una propuesta que fusiona el vino con el arte contemporáneo. La pieza final de este proyecto, un hito para la Bodega Otazu, verá la luz en 2042, exactamente 30 años después de su concepción. Este evento, integrado dentro del programa internacional de ARCOmadrid 2020, une arte, vino, naturaleza e historia con la premisa de la creación artística como herramienta de reflexión, innovación y mejora socia.

Otra novedad ha sido la presentación de la exposición 'Malloak', comisariada por Miguel López-Remiro, profesional del mundo de los museos y de la dirección artística. Esta muestra es un homenaje a Elena Asins, como recuerdo del significado de esta tierra de Navarra en su obra y todo lo que hizo por sus gentes, y se centra en su etapa artística final sobre todo en su investigación de Antígona de Sófocles.

La exposición incluye obras en préstamo del Museo Reina Sofía, una colección privada y piezas de la colección de la Fundación Otazu. Los asistentes al ArtWeekend4 tendrán ocasión de recorrer el Señorío de Otazu, pueblo medieval del siglo XII, y visitar las obras monumentales de Manolo Valdés, Xavier Mascaro, Baltasar Lobo, Jim Dine y Leandro Erlich. Paralelamente, se podrán ver las obras ganadoras de ediciones anteriores del Premio de la Bienal de Arte Monumental de la Fundación Otazu: 'El color de nuestras vidas' (2015), del chileno Alfredo Jaar y 'Crudo Zarzo' (2017), del artista español Asier Mendizabal.