Dani Fernández expande el relato de Incendios (2019), el debut en solitario que lo señaló como uno de los exmiembros de Auryn con mayor proyección, con una reedición que incluye algunos de los duetos que lo llevaron a ser el compositor que es hoy, avalado por músicos como Pablo Alborán o Andrés Suárez.

"He tenido que quemar mucho de mí para encontrarme, pero eso lo tenemos que hacer todos en nuestros trabajos: reinventarse una y otra vez para encontrar la mejor versión", afirma el joven músico ciudadrealeño.

Fernández (Alcázar de San Juan, 1991) ha dado en llamar a esta vuelta de tuerca discográfica Incendios y cenizas (Warner Music), ya en el mercado, porque si bien "había mucho que borrar" de su pasado, tampoco había que olvidarlo.

"Empecé a hacer este disco sin ninguna prisa, para encontrarme lo primero, porque no quería que la gente lo viera como una continuación de la banda de la que venía", cuenta sobre un proceso de aprendizaje en el que contó con el apoyo de artistas como Andrés Suárez, Funambulista o David Otero para encontrar a ese Dani Fernández que en "Auryn no aparecía por ningún lado".

Cuenta que para él los duetos son "como las fotografías" que otros se hacen con los amigos, retazos en los que "dejas lo mejor de ti junto a otra persona". Ahora esas canciones a varias manos, como las que hizo también con Nil Moliner o Marta Soto, son las "cenizas" que recupera por primera vez en formato físico con un segundo CD dentro del álbum, como una ruta hacia el músico que es hoy.

Muy importante en su despegue fue contar por ejemplo con el apoyo de Pablo Alborán, que lo invitó a tocar con él en uno de sus conciertos; pero en este camino de crecimiento profesional y personal también se encontró con escépticos, sorprendidos por el sonido de su primer álbum. "Lo hacían sin querer, pero se notaba que no creían que alguien que viniera de Auryn pudiera escribir canciones que llegaran a la gente", señala. Y decidido a seguir prendiéndole fuego al presente para mejorar, ya piensa en el que será su nuevo trabajo.