- El escritor John Boyne ha novelado los últimos 70 años de la historia de su país natal, Irlanda, y "lo oscuro" que fue ese período para las personas apartada de la sociedad, en su nuevo trabajo literario Las furias invisibles del corazón (Ediciones Salamandra).

En rueda de prensa telemática que tuvo lugar ayer, como explicó que el protagonista de la novela, Cyril, encarna "el aislamiento y la soledad de una persona que no encuentra mucho amor en su vida" y que inicia un proceso de superación personal, de búsqueda de su verdadera identidad y de maduración sentimental.

La trama está narrada desde el punto de un anciano homosexual nacido en 1945 en Dublín, adoptado por un matrimonio adinerado, distante y frío que le enseña a "esconder y enterrar sus secretos" y emociones, algo que le convierte en un chico tímido y solitario que se encontrará inmerso en la búsqueda de la instintiva necesidad humana de afecto y felicidad.

Sin embargo, el autor de El niño con el pijama de rayas (2006) reivindicó que la Irlanda actual es un lugar "optimista, moderno y saludable" que se ha ido forjando a lo largo de las últimas décadas gracias a hitos como la toma de posesión en 1900 de Mary Robinson como la primera mujer presidenta de Irlanda o la aprobación del matrimonio gay por amplia mayoría en el referéndum de 2015.

Según Boyne, es inexplicable y excesiva la capacidad de influencia que ha tenido históricamente la iglesia -"que ha caído en la corrupción desde los años 40"- en las decisiones del Gobierno, algo que aseguró ha generado desilusión en la ciudadanía, que actualmente encuentra su espiritualidad en su interior y no en una institución.

En ese sentido, el autor irlandés desveló que él mismo sufrió casos de abuso infantil en la escuela y que ha dejado que su propia infancia y demás "implicaciones personales contribuyan" a su obra con la esperanza de animar a otras personas a explicar su historia y a denunciar. De hecho, según confesó, el saber que otro docente de su escuela había sido condenado el pasado mes de enero le animó a él mismo a denunciar los hechos.

Aseguró que explorar Irlanda en este homenaje a las víctimas de rechazo social escrito a lo largo de dos años le ha servido para encontrar respuestas: "Tantos hombres y mujeres homosexuales no vivieron las vidas de deberían haber vivido porque la sociedad irlandesa no estuvo a la altura". Y por ello, dijo, con esta novela rinde homenaje a las víctimas de los prejuicios del dogma religioso, la segunda de su amplia obra que ambienta en Irlanda tras su anterior libro, Las huellas del silencio (2014), en la que hablaba de abusos sexuales en la Iglesia.

Para Boyne, todavía quedan casos por descubrir aunque haya salido mucho a la luz en los últimos años, desde mediados de los 90, cuando la gente empezó a denunciar en la Policía hechos que luego acabaron en los tribunales. "Cada caso inspiraba a otros que habían tenido esas malas experiencias para seguir denunciando".

Pese a la dureza de la trama de Las furias invisbles del corazón, el autor aseguró que ha incorporado elementos humorísticos y "personajes optimistas que no dejan que la vida les aplaste", algo que convierte a Cyril en uno de los personajes favoritos que ha creado.

Boyne (Dublín, 1971), que ha dedicado esta novela al escritor John Irving, es autor de las mencionadas El niño con el pijama de rayas y Las huellas del silencio, junto a otras exitosas obras como La casa del propósito especial (2009) y El ladrón del tiempo (2000), entre otras publicaciones.