Poner en valor el significado de la mitología vasca, poderoso vínculo entre el ser humano y la naturaleza, es la intención del nuevo proyecto de Tea en la azotea, marca de muñecas creada por la artista textil Gabriela Barrio (Pamplona, 1970), que se materializa en una atractiva exposición visitable hasta el 2 de marzo en la casa de cultura del Valle de Aranguren (Mutilva).

Con su lenguaje habitual que son las telas, los hilos, los alambres, las lanas o el papel maché, Tea en la azotea revive y reinventa el universo de la diosa de los antiguos, Mari, la madre, la Tierra, y, con ella, a sus criaturas llenas de valioso simbolismo: Sugaar, el culebro; Atarrabi y Mikelats, el Bien y el Mal; los Jentil, que enseñaron a los seres humanos a sembrar el trigo, moler el grano y fundir el mineral de hierro; Tartalo y Basajaun, quien fue el primer agricultor, el primer molinero y el primer herrero, así como el primer cuidador de los bosques que habita; los Herensuge, dragones de Mari de una, de tres y de siete cabezas; pequeños seres como los Ipotx, habitantes también de la naturaleza; los Familiatarra, que habitan las casas de los humanos; o los traviesos Galtzagorri, que viven en los alfileteros; sin olvidar a las hermosas Lamias, que Mari alumbró para poblar los ríos de su tierra.

Mitología, seña de identidad de las culturas

Todas estos maravillosos seres pueblan la exposición La diosa Mari y sus criaturas/Jainkosa Mari eta bere izakiak, que para Gabriela Barrio ha sido "un hermoso reto" que empezó a gestarse en su interior en pleno confinamiento. "Pensé en la mitología, que siempre ha sido una seña de identidad de las culturas, y en concreto en la mitología vasca, que para mí era bastante desconocida. Así que hice un trabajo de documentación muy bonito, en especial en el fondo que tiene el Koldo Mitxelena", cuenta. Le faltaba el hilo conductor para la exposición, y pensó en la escritora Toti Martínez de Lezea, con quien se lanzó a contactar por redes sociales. "Enseguida mostró su disposición y me ayudó a seleccionar lo importante y a ordenar el material para la exposición. Ella me habló mucho de José Miguel de Barandiarán, fue mi vínculo con el patriarca de la cultura vasca, una figura que siempre, desde que estudiaba Historia, me ha fascinado, como su afán por conservar la cultura de su tierra", cuenta la creadora de Tea en la azotea.

De la mitología vasca pone en valor "su vínculo tan especial con la visión medioambiental. Mari es la diosa de la tierra, de los 4 elementos; es una cultura en la que son muy importantes los bosques, los ríos, la lluvia, el viento..., en la que esos elementos naturales se personifican. Y hoy, con el tema de la ecología, recuperar aquellos símbolos y relatos antiguos, aquellas interpretaciones de lo real que han sido relatadas como verdades o como entretenimiento de los narradores y sus oyentes, sirve como llamada de atención para rescatar la esencia de la naturaleza, de la sostenibilidad, esa unión ser humano-naturaleza, y reivindicar que tengamos una relación adecuada con nuestro medio ambiente", apunta la artista textil, que recurre en su trabajo en gran parte a materiales reciclados.

La exposición, que itinerará por varios lugares de Navarra y la CAV, se enriquece con fotografías de David Muñiz, editor también del audiovisual que luce en la muestra y en el que la voz de la actriz navarra Ventura Ruiz poetiza y hace suyo un texto creado a partir de un guion de Toti Martínez de Lezea.

EN CORTO

Taller, este sábado: En torno a la exposición, este sábado por la mañana habrá un taller gratuito e intergeneracional en Mutilva (casa de cultura) en el que se unirán las disciplinas del teatro y el arte plástico. Con Tea en la azotea y Ventura Ruiz.

Próximamente: Tras su paso por Mutilva, la muestra se verá en las casas de cultura de Sangüesa (del 17 de marzo al 3 de abril), Noáin (a partir del 3 de octubre) y Alsasua (diciembre).