Síguenos en redes sociales:

Miguel Izu: "El reto como autor es que no se distinga lo que he inventado de lo investigado"

El autor navarro presenta este sábado 4 de junio en la Feria del Libro de Navarra su última novela, 'Retorno a Balincourt', galardonada con el Premio BMB 2022

Miguel Izu: "El reto como autor es que no se distinga lo que he inventado de lo investigado"Patxi Cascante

El autor navarro Miguel Izu (Pamplona, 1960), colaborador de DIARIO DE NOTICIAS, regresa al género de novela negra histórica con el libro Retorno a Balincourt . Ficción y realidad se citan en este relato guiado por Eugenio Cirauqui, comandante del ejército replubicano, y que ahonda en la relación entre el mercante de armas Basil Zaharoff y Pilar Muguiro Beruete, duquesa de Marchena. Todo ello con los conflictos bélicos del siglo XX como telón de fondo.

¿Qué se va a encontrar el lector en 'Retorno a Balincourt'?

-Una novela negra histórica, que es el género que más cultivo, donde se mezclan hechos y personajes reales con otros de ficción. Su origen es inusual, normalmente no atiendo las muchas y bienintencionadas sugerencias que recibo de temas para una novela, la necesidad de escribir me tiene que salir de dentro, pero en este caso Andoni Esparza Leibar, funcionario jubilado -fue secretario de Lesaka- y escritor de ensayo como yo, me sugirió escribir una novela histórica sobre Basil Zaharoff y su relación con Pilar Muguiro Beruete, cuya familia era originaria de Navarra. Con bastante escepticismo inicial, me puse a hurgar un poco sobre esos personajes€ y me acabó saliendo la novela.

El libro está protagonizado por Eugenio Cirauqui, un comandante del ejército republicano. ¿Cómo presentaría a este personaje?

-Es un militar nacido en Tafalla, por mantener la conexión navarra, que me sirve para unir los diversos episodios a través de los cuales doy un repaso a parte de la vida de Zaharoff y Pilar Muguiro. Zaharoff era fabricante de armas, lo que me llevó la trama a varios escenarios bélicos de la época, por desgracia demasiado abundantes: la guerra del Rif, la guerra civil española, la II Guerra Mundial€

En las primeras páginas de la novela llegamos junto a Eugenio Cirauqui al castillo de Balincourt, un escenario al que nuestro protagonista regresa casi por casualidad y que, de alguna manera, detona la historia. ¿Qué le atraía de este lugar, que da título al libro?

-Al estudiar la biografía de Zaharoff y su esposa me llamó la atención este castillo del siglo XVIII, tiene una historia realmente fascinante, y por eso le di un papel central en la historia e incluso en el título, que es un indisimulado homenaje a Retorno a Brideshead, serie de televisión sobre la novela de Evelyn Waugh que me encantó allá por los años 80.

La muerte de Francisco de Borbón marca el comienzo del relato. ¿Cómo fue su relación con su esposa Pilar de Muguiro?

-Era primo de Alfonso XII, hijo de dos infantes de España que eran tío y sobrina, y que, como en otros tantos casos de exceso de mezcla de la misma sangre, tuvo problemas de salud, sobre todo de salud mental, toda la vida y vivió principalmente internado en establecimiento psiquiátricos. Su matrimonio fue concertado de cara a la galería, pero los cónyuges vivieron separados desde muy pronto y Pilar de Muguiro fue amante durante muchos años de Basil Zaharoff. Incluso se cree que las hijas que tuvo Pilar de Muguiro y que llevaban el apellido Borbón eran, en realidad, hijas de Zaharoff.

Precisamente cuando Francisco de Borbón fallece, Pilar de Muguiro vivía con Basil Zaharoff, en el castillo de Balincourt. ¿Quién era este negociante en armamento, conocido también como 'Rey de los Cañones'?

-Probablemente el principal fabricante y vendedor de armas de toda la historia y uno de los hombres más ricos y poderosos de su época. Un personaje fascinante, sobre el que se ha escrito mucho. Incluso aparece en una de las aventuras de Tintin, La oreja rota, con un seudónimo provocando una guerra y vendiendo armas a ambos bandos, lo que en su época se llamó "el método Zaharoff".

Según apunta al comienzo de la novela, el sepulcro donde ambos están enterrados fue profanado en 1937. ¿De qué manera impulsa esta tumba el relato?

-La violación del sepulcro es un dato real y nunca se supo el motivo real ni sus autores. Esa profanación de la cripta funeraria en la capilla de Balincourt, que aparece en la propia portada de la novela, me pareció un buen McGuffin, como diría Hitchcock, un buen recurso sobre el que construir la trama. Al final de la novela ofrezco una explicación sobre el porqué de la profanación€ y hasta aquí puedo leer.

E¡n la novela hay personajes que sí existieron y se recorren episodios históricos como la guerra de Marruecos, la Guerra Civil o la Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo tejió este periplo histórico y por qué hechos viaja al espectador a lo largo del relato?

-El núcleo sobre el que desarrollé la idea de la novela son tres muertes y tres sepulcros en Balincourt, datos totalmente históricos. Añadí algo ficticio, aunque verosímil, que una de esas muertes era, en realidad, un asesinato no descubierto. Y son las fechas de esos fallecimientos las que me determinan el período histórico en que se desarrolla mi trama, entre los años 20 y los años 40.

¿Cuánto de ficción y cuánto de Historia hay en la novela y cómo es el equilibrio entre ambas?

-Es difícil dar una proporción. Hay muchos hechos históricos, muchos personajes reales y los escenarios que describo son absolutamente reales. Precisamente el reto para mí es hacer una mezcla tal que el lector dude sobre cuánta ficción he puesto. Y que yo mismo acabe no distinguiendo del todo lo que me he inventado de lo que he investigado.

Entre otros personajes que nos encontramos en la publicación figura Luis Buñuel, ¿qué papel juega el director de 'Viridiana'?

-Parte de la trama sucede en la embajada española en París al inicio de la guerra civil española, donde el protagonista es agregado militar. Y cuando me documenté descubrí que, en la realidad, Luis Buñuel estuvo trabajando en la embajada en esa época al servicio del Gobierno de la República en tareas de propaganda, y en sus memorias cuenta algunas sabrosas anécdotas. La tentación de incorporarlo a mi historia era irresistible.

También hay una referencia a Hemingway, como uno de los intelectuales que apoyó a Luis Quintanilla. ¿El autor de 'Fiesta' no podía faltar en una novela de Miguel Izu?

-Un guiño a mis lectores, facilitado porque parte de la historia se desarrolla en el París de los años 20, el París de Hemingway; Luis Quintanilla, pintor cántabro, era amigo de Hemingway y también trabajó para el Gobierno de la República en Francia, así que era inevitable meterlos en mi novela. Como la vida está hecha de casualidades, la publicación de Retorno a Balincourt ha coincidido con la de otra novela donde también hablo, y mucho más extensamente, de Hemingway, La habitación de Vanderford, y en la que también juego a mezclar realidad y ficción.

En la novela también se abordan intrigas diplomáticas y el intento de superar el embargo de armas a la República española, ¿qué claves históricas en torno a este hecho cree que arroja este libro?

-Basil Zaharoff, que es de quien parto al documentarme para la novela, murió en 1936, así que también fue bastante natural ligarlo con la cuestión del embargo de armas a la República, y también citar su amistad con quien fue llamado el Zaharoff español, Juan March, que tuvo mucho que ver en el alzamiento contra la República. No ofrezco grandes novedades, son unos hechos perfectamente conocidos por los historiadores y me encajaban muy bien en mi historia. Pero probablemente muchos lectores de novela se acerquen por primera vez a esos episodios no demasiado divulgados entre el público general.

Hablamos de una historia que recorre diferentes conflictos bélicos en tiempos en los que la guerra, en Ucrania, Somalia, Yemen o Siria, precisamente está a la orden del día. ¿La Historia es cíclica y se repite?

-Por desgracia, sí. En la historia de la humanidad no ha habido ningún momento de ausencia total de guerras, aunque sigue siendo una aspiración irrenunciable trabajar para que algún día suceda. En mi novela el protagonista, un militar nada militarista, hace algunas reflexiones al respecto.

A día de hoy, ¿qué ha sido del 'château' de Balincourt?

-Se halla perfectamente conservado, a unos cincuenta kilómetros al norte de París, está declarando monumento histórico pero es de propiedad particular, pertenece a una aristocrática familia francesa, descendiente de los personajes de mi novela. No está abierto a las visitas del público. Como la novela la escribí durante la pandemia no he viajado allí, todo lo que conozco y cuento ha sido mediante mi tarea de documentación a distancia. Si paso por París, espero acercarme a echarle un vistazo, aunque sea desde el exterior de la verja€