Su último trabajo fue un álbum cuádruple, ‘Mester de juglaría’, en el que un montón de bandas quisieron felicitar a Saurom por sus veinticinco años de carrera.

–Así es. Salió hace un par de años. Queríamos celebrar nuestros veinticinco años, que es una proeza para un grupo independiente como el nuestro. La sorpresa fue que se sumaron muchísimas bandas, como los suecos Therion, Medina Azahara, Mägo de Oz, bandas americanas que hemos conocido en nuestras giras por aquellas tierras, grupos jóvenes… Teníamos los cuatro discos ya completos, pero se seguían sumando bandas, así que tuvimos que sacar un quinto digital. Fue una celebración increíble.

¿Qué se siente al echar la vista atrás después de semejante celebración?

–Lo primero que me viene a la cabeza es que el tiempo ha pasado muy rápido. Yo empecé en el grupo con 17 años y ahora tengo 45. Ha sido una trayectoria con muchos discos, conciertos, festivales… Ha habido momentos muy buenos, momentos difíciles y tristes, como cuando algún miembro ha abandonado la banda. Y también muchos momentos de gloria, como nuestro último concierto en México, que tocamos delante de 14.000 personas. Lo grabamos y saldrá en DVD a final de año. Empezamos de la nada, teloneando a otros grupos, dándonos a conocer, tocando en festivales, tocando a nivel nacional, luego dimos el salto a América… Ha costado mucho trabajo, pero hemos llegado hasta aquí.

Las cosas les van bien, porque sin salir el disco a la venta, ya tienen más de veinte fechas anunciadas.

–Una de las claves es que, hace unos años, tomamos nosotros el control de todo. Habíamos trabajado con varias discográficas, productoras y demás, pero ahora tenemos nuestro propio sello, Zaluster, y nos encargamos de todo. Cuidamos muchísimo cada pequeño detalle, somos nuestra propia empresa y cada uno de nosotros lleva una parcela. Entre todos vamos remando en la misma dirección y con trabajo y esfuerzo llegan los buenos resultados. 

Ha mencionado las giras por América, y ese es un gran mercado para el grupo, porque toca habitualmente por México, Costa Rica, Colombia, Ecuador…

–Hemos hecho muchas giras por América, sí. Unas quince. Hemos estado en Estados Unidos y en casi todos los países. Salvo en Brasil, Venezuela, Uruguay y Paraguay, hemos estado en todos. Por población, el público allí es mayoritario, sin desmerecer lo que tenemos en Europa, que también hemos tocado en Portugal y en Italia y nos han tratado siempre muy bien. En América tenemos clubs de fans que nos ayudan con muchas cosas, y todo eso impulsa que todos los años vayamos una o dos veces por allí. 

Saurom ha marcado al público americano, y América también ha marcado a Saurom. El primer adelanto de su nuevo disco es una versión de ‘La llorona’, la mítica canción mexicana.

–Sí. Somos muy amantes de la literatura, de las diferentes culturas, de la música tradicional… En nuestra carrera hemos grabado discos dedicados a poetas, a poetisas, a leyendas de algún lugar… Cuando hemos pasado mucho tiempo en un sitio, nos ha inspirado. La llorona es un homenaje a la cultura mexicana, cuando la tocamos allí la gente se volvió loca. La hemos hecho con todo el respeto, nos la hemos llevado al folk metal y al heavy metal, que puede ser impactante, pero a la gente le ha gustado mucho.

Que un grupo como Saurom consiga semejante éxito tiene doble mérito, porque practica un estilo que nunca ha recibido grandes apoyos de discográficas ni de medios de comunicación. ¿A qué lo atribuyen?

–A que somos un grupo de verdad. Llevamos muchos años, desde niños, que teníamos mucha fe, queríamos avanzar y perseguir nuestros sueños. Empezamos a estudiar, a profesionalizarnos, a conseguir pequeñas metas y a valorarlo, y esto lo pondría en mayúsculas, porque quizás otra gente, si tiene mucho apoyo de los medios y de las discográficas, no sabe valorarlo. Nosotros sí, porque sabemos el esfuerzo que nos ha costado y todo a lo que nos hemos tenido que enfrentar.

El nuevo disco, ‘El pájaro fantasma’, sale el 30 de junio. Tengo entendido que va a ser más oscuro que los anteriores. 

–Veníamos de varios discos más positivos, con más luz, con más color. Ahora, tanto la portada como el contenido de las canciones es más oscuro. Nos hemos basado en la leyenda de Los ojos verdes, de Gustavo Adolfo Bécquer, por ejemplo, porque nos encanta el Romanticismo. Hay otras leyendas como La llorona, o El pájaro fantasma, que está inspirado en una historia dramática de un pueblo muy bonito que se llama Arcos de la Frontera. Con canciones de este tipo, el resultado final ha tomado este tinte más oscuro, más romántico.

El sábado van a poner fin a una anomalía, porque, en más de veinticinco años, Saorum nunca había tocado en Navarra.

–A mí me encanta Iruña, he estado un montón de veces. Me encanta Pamplona, me encanta Navarra, tengo un montón de amigos allí, pero, incomprensiblemente, nunca habíamos ido a tocar. Para nosotros era un reto que teníamos desde hace muchos años, es una tierra que amamos. Notábamos que el grupo no era tan conocido en Navarra como en otras ciudades de la zona como Logroño, Vitoria o Bilbao, donde sí hemos estado y con muy buenos resultados. Esta gira decidimos que teníamos que ir. Hablamos con la sala Tótem y nos pusieron todas las facilidades. Esperemos que sea un gran concierto y que los que vengan a vernos salgan satisfechos. 

Entiendo que, a las puertas de publicar el nuevo disco, el repertorio será un compendio de temas nuevos y clásicos del grupo.

–Sí, hemos preparado un concierto de dos horas. Haremos un buen alarde de clásicos para resumir nuestra carrera, y también habrá canciones de nuestro nuevo disco. Estamos muy contentos y seguro que los que vengan pasarán un buen rato. l