El trabajo de los corresponsales sobre el terreno en la escena internacional sigue siendo imprescindible para una información de calidad, una práctica que, sin embargo, se ve amenazada por la actual crisis de la covid-19 y la propia estructura de los medios, que recurren a los llamados periodistas "freelance".Esta es una de las conclusiones de un debate organizado esta semana en Barcelona por Lafede.cat, una red de 120 organizaciones que trabajan por la justicia global y la erradicación de las desigualdades- bajo el título "¿Se puede hacer periodismo internacional sin coger el avión?", en el que se abordó esta problemática.

La que fuera directora de TV3 y presentadora de El Matí de Catalunya Ràdio, Mònica Terribas, la corresponsal en Beirut de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals, Txell Freixas, y Agus Morales, director de la Revista 5W, ganadora del premio Internacional de Periodismo Rey de España, otorgado por la Agencia EFE y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, abordaron la problemática de hacer periodismo internacional en un contexto complicado como el actual.

Terribas subrayó la importancia de la labor de los corresponsales para que aporten su necesaria mirada sobre el terreno, una "mirada de transformación" que se debe poder trasladar, porque "la gente que te escucha y te ve tiene criterio propio para saber que estos minutos les aportan mucho más que un titular".

Las nuevas formas de hacer periodismo internacional han puesto sobre la mesa una reflexión acerca de la necesidad de contar con periodistas locales y con las redes sociales, pero Txell Freixas destaca que "debe ser una exigencia para los medios de comunicación públicos ir al terreno" de aquello sobre lo que se informa.

Aunque existe cierta creencia de que se ha reducido la presencia del periodismo internacional en los medios, no se debe generalizar este argumento, pues como opina Agus Morales, hay más información internacional que antes, pero "el problema son los recursos y cómo se hace esta información", con menos corresponsalías y la proliferación de periodistas "freelance" intentando publicar sus trabajos.

En este sentido, Freixas constató la dificultad para estos periodistas, en situación laboral precaria, de poder vender historias de seguimiento sobre crisis abiertas, a las que se les anteponen noticias potentes que aportan alguna novedad.

La solución se basaría en buscar un ideal en el que, a través de la suma de estas historias, se pueda generar un contexto que ayude a procesar la información al receptor cuando le llegue un titular.

En declaraciones a EFE, el fotoperiodista independiente Ricardo García Vilanova, ganador del tercer premio en la categoría de Temas de Actualidad de la última edición del World Press Photo, también destaca que lo importante del periodismo "es vivirlo en primera persona, porque es cuando realmente tomas conciencia" de los hechos, y añade que con "la proximidad" el periodista se convierte en "un elemento más de ese contexto".

"Ahora existe un camino sin retorno hacia el ocaso de lo que ha sido el periodismo como tal", opina García Vilanova, que reclama la necesidad de poner remedio a esta situación para que la información no quede "restringida a determinados o grandes medios, que darán su visión de lo que está sucediendo en el mundo".

En este sentido, García Vilanova cree que la información "tiene que existir desde la perspectiva de entidades que se nutren o que funcionan al servicio de la ciudadanía", pues el derecho a la información está recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Por ello, más allá del tiempo dedicado a temas internacionales en la agenda mediática y su jerarquía, los expertos consideran que también se debe abordar la mirada con la que estos se enfocan, los estereotipos que vamos dejando atrás y la primacía de las noticias vinculadas a la violencia y al terrorismo.

De la misma forma, las fronteras mentales que teníamos de aquello global y local se están desdibujando, pues "el periodismo no entiende de limitaciones o marcos mentales de lo que al final son historias, más cercanas o más lejanas", concluye Freixas.