pamplona - Entre viajes y reuniones, desde que fue elegido -el pasado 17 de junio- no ha parado. Rodrigo Domínguez (Ourense, 1977), marchador en activo con licencia navarra y afincado en la Comunidad Foral desde hace 8 años, es el nuevo presidente de la Federación Navarra de Atletismo. Llega al cargo en sustitución de Enrique Sánchez, y nos cuenta cuál es su proyecto.
¿Cómo le surge la idea de intentar dar el salto a la presidencia de la Federación?
-La inquietud me surgió hace unos dos años. Siempre he pensado que tenía que hacer algo para devolverle al atletismo todo lo que me ha dado. Lo hablábamos en los viajes y muchos estábamos de acuerdo en que había que hacer algo y cambiar cosas. Me sentía apoyado, decidimos presentar una candidatura y aquí estamos. Estoy emocionadísimo.
Habla de cambiar cosas. ¿A qué se refiere?
No hemos vendido bien el producto. La Federación era demasiado inmóvil, faltaba algo para involucrar a instituciones, medios de comunicación y demás. En el atletismo navarro hay un nivel enorme, hay que hacer algo para que la gente se entere de que estamos ahí, de que este deporte es un espectáculo. Si acercamos el atletismo a la gente, le va a gustar.
¿En quién va a apoyarse para trabajar?
-Mi intención ha sido siempre la de formar un equipo de varias personas para trabajar conjuntamente. Yo sólo seré la cabeza visible, con alguna responsabilidad más que el resto. De momento cuento con dos vicepresidentes, Francis Hernández (Pamplona Atlético) y Dani Zudaire (GANA), y un secretario, Vicente Solchaga (Hiru-Herri). Estamos pendientes de una cuarta persona y de un director deportivo. He buscado que haya personas de distintos clubes para poner en común todas las opiniones. Y quiero a gente con ilusión.
¿Cuál es su proyecto para estos cuatro años al frente de la Federación?
-Lo principal es aportar ilusión. Esto estaba un poco estancado, algo que no se entiende con el buen momento que atraviesa el atletismo navarro. Otra idea clave es la de conseguir recursos: estamos sobreviviendo con una subvención escasísima y no tenemos de dónde sacar dinero para fomentar la base, hacer concentraciones... Nuestros atletas no ven recompensado su esfuerzo, y a eso hay que darle una vuelta. Además, tenemos unas joyas como el Centro de Tecnificación de Larrabide y el CEIMD que no se están rentabilizando como se debería.
¿Qué soluciones plantea?
-Hace falta mucho trabajo. Habrá que implicar a empresas privadas, porque está claro que este deporte está funcionando bien, con un montón de chavales que se están saliendo. Tenemos que volver a ser ese deporte puntero que un día fuimos, ¡que el atletismo es deporte olímpico! Debemos volver a ocupar el lugar que nos corresponde.
Tiene la idea de prestar más atención a las carreras populares, ese fenómeno tan en boga.
-La Federación debe llegar a todo, no sólo al atletismo profesional. Las carreras populares son un fenómeno que ha calado hondo en la población y hay que saber como enfocarlo. Tenemos que pasar a ser protagonistas, velar por nuestro deporte en todas sus formas. Porque todo el que corre puede aportar algo.
¿Le preocupa el elevado número de muertes en el atletismo aficionado?
Sí, debemos preocuparnos por la salud del que corre, porque está muriendo gente y no puede ser. Debe existir algún tipo de regulación o de control. Tenemos que crear foros de salud y hay que convencer a la gente de que hay que cuidarse.
Llega al cargo en un buen momento. Muchos atletas navarros jóvenes piden paso...
-Hay un nivel altísimo. Puede que Sergio Fernández, Javier Colomo y Adrián Vallés sean los más conocidos, pero hay otros muchos haciéndolo muy bien: Alba Fernández, aunque ahora no atraviese su mejor momento, Izaskun Turrillas, Manu y Nico Quijera... Todos ellos están ahí por méritos propios, porque se lo han currado, y eso para nosotros es la leche. Nos da energía para trabajar y funcionar. Hay que mojarse por estos chavales.
La última gran noticia la protagonizó Sergio Fernández este jueves rozando un nuevo récord nacional en Madrid.
-Espectacular, con sólo recordarlo se me pone la piel de gallina. Se ha quedado a dos centésimas de un récord del año 87, el récord nacional más antiguo. Un chaval de Barañáin, formado aquí, se ha colocado quinto en el ranking europeo y se va a los Juegos Olímpicos. Es una pasada. Le escribí un tuit dándole las gracias: debuto en la Federación con una mínima olímpica (risas).
Larrabide parece que da sus frutos.
-Todos estos atletas están catalogados como deportistas de tecnificación y se forman a través de programas como el de Larrabide, pero creo que el alto rendimiento no se trabaja lo suficientemente bien en Navarra. Hay materia prima suficiente para sacar más atletas olímpicos. Se lo merecen.
¿Cómo están las cuentas de la Federación?
-No te diré que estamos pelados pero casi. La Federación está saneada y funciona bien, pero no hay dinero suficiente para desarrollar todo lo que queremos. El Gobierno Foral debería aportar más, no se puede depender al cien por cien del dinero público, ese modelo está obsoleto.
¿Se ha reunido ya con el Gobierno o con el INDJ?
-Todavía no he podido, pero ya hemos solicitado varias citas. Nos interesa estar con Rubén Goñi, del Instituto Navarro de Deporte y Juventud, porque entendemos que es el INDJ el que debe defender a los atletas navarros. También queremos hablar con el Ayuntamiento de Pamplona porque estamos interesados en realizar eventos de carácter nacional aquí. Nos reuniremos.