El catalán Marc Soler (Movistar) volvió a meterse en una escapada en busca de la victoria de etapa, pero en esta ocasión tropezó con la fuerza del suizo Marc Hisrchi, vencedor en Sarran, haciendo estéril la persecución del ciclista del conjunto telefónico.

"Pensábamos que entre Schachmann y yo, a relevos, podríamos intentar coger a Hirschi, pero ha vuelto a demostrar estar realmente fuerte. Ya lo mostró el otro día, cuando no consiguió rematar, y hoy sí ha podido imponerse. Solo queda felicitarlo".

Movistar entró en la primera escapada del día con Imanol Erviti, y tras ser neutralizada, se formó otra a iniciativa del corredor catalán, quien se llevó a rueda al alemán Schachmann.

" Nosotros como equipo hemos hecho lo que hemos podido. Por mi parte he dado todo lo que tenía, igual que Schachmann. En esos relevos no queríamos ni podíamos guardar nada, porque ser segundo ó tercero está bien, pero lo que vale y lo que buscábamos es la victoria".

Soler admitió que Hirschi iba muy fuerte tras superar el último puerto y fue imposible alcanzarlo, y además el grupo perseguidor con el francés Alaphilippe iba recortando.

"Cuando nos ha cogido el grupo grande ya iba muerto, lo he dado todo y me he soltado a poco de meta porque no podía más".

"Mañana será otro día duro. De salida hay una subida muy exigente y seguro costará controlar la carrera. Veremos la fuga que se hace ahí y, a partir de ese momento, cómo se desarrolla el día. Pensábamos que hoy llegaría la fuga de salida, pero Bora controló desde muy lejos. Igual mañana tenemos una situación similar y nos sorprende otro equipo".