A lo grande. El equipo de Aranguren Mutilbasket femenino tuvo en el Ayuntamiento del Valle de Aranguren un recibimiento a la altura de lo que consiguió el pasado domingo en Sevilla: el ascenso a Liga Femenina 2 (LF2).

Once camisetas presidieron el balcón consistorial durante la tarde y esperaban a que salieran sus dueñas. Antes, las diez jugadoras que acudieron -faltaron Cecilia Liñeira y Olaiza Díez de Ulzurrun- y el resto de representantes del club fueron recibidas en el salón de plenos del Ayuntamiento con el alcalde, Manolo Romero, a la cabeza.

Romero agradeció el esfuerzo a las jugadoras, quiso compartir “la alegría del ascenso” y se enorgulleció ya que la próxima temporada llevarán el nombre del Valle de Aranguren “por muchos lugares del Estado”.

La corporación municipal tenía guardadas varias sorpresas. Cada jugadora recibió un pañuelo del Valle y un póster conmemorativo del ascenso. Además, el Ayuntamiento tuvo detalles con personas del club como David Pastrana, Óscar Quintana y su mujer Maite.

Una vez finalizado el acto protocolario, las jugadoras, el entrenador y el director deportivo fueron llamadas de una a una, con aplausos, para salir al balcón: Natalia Oroz, Cecilia Liñeira (ausente), Anna Corral, Clara Vidaurre, Laura Arrondo, Mar Benito, Andrea Elso, Irati Ibañez, Natalia Mendaza, Ane Valero, Leyre González, Olaia Díez de Ulzurrun (ausente), Iñigo Baigorri y Xabier Jiménez. Desde el balcón cantaron el We are the champions con los niños y niñas que les miraban desde abajo con admiración.

“No esperábamos que nos iban a hacer nada. Ha sido inesperado”, admitió Clara Vidaurre, capitana del equipo. “Además, ver a gente más pequeña que puede verse reflejada en ti es muy bonito”, comentó.

La capitana confesó que al terminar la final ante el Araski: “Nadie era muy consciente de lo que habíamos conseguido. Fue una locura”. Y en estos días siguen asimilando la situación: “Aún y todo no llegamos a ser conscientes de lo que ha supuesto este ascenso. Estamos con mucha ilusión por lo que viene y muy contentas por lo que hemos hecho”.

Iñigo Baigorri, entrenador de Mutilbasket, afirmó que fue un acto “muy emotivo”. Cinco días después del ascenso, los sentimientos se han calmado: “Con los días va bajando el nivel de emoción -mientras tanto, un niño se acerca al grito de ‘¡Entrenador!’ y Baigorri le firma en el brazo-. La gesta es mayúscula a nivel personal, del club y del equipo”.

Álvaro Lázaro, el presidente de Aranguren Mutilbasket, no duda en calificar el ascenso a LF2 como “un hito” que no entraba en sus planes. “Quitando a Cecilia (Liñeira), el resto son crías de la casa. Las veteranas, como la capitana Clara Vidaurre, son del año 2000 y hay varias de 17 años”.

“Me ha parecido un acto precioso por parte del Ayuntamiento que nos ayuda a seguir trabajando y peleando por esta ilusión”, reconoció Lázaro. Desde la directiva ahora afrontan un reto aún mayor como es el de encontrar patrocinadores para competir en Liga Femenina 2: “El salto es bestial; multiplicamos por ocho el presupuesto. Tenemos un mes de plazo y no hemos parado. Estamos intentando buscar espónsors como sea. Las ventajas fiscales que hay son importantes y en eso estamos. A ver si se anima alguna empresa y salimos con garantías”.