El Valle de Egüés se ha proclamado campeón de la Euskal Kopa de Primera División masculina al vencer al Ibaizabal por 64-53 en una emocionante final.

Menos suerte tuvo el otro representante navarro, el San Ignacio Premo, que cayó en la final femenina frente al Universidad Deusto Loiola Indautxu, por un disputado 67-75. Los dos partidos se jugaron en el polideportivo Maristas de Sarriguren en medio de un gran ambiente, con más de 300 aficionados en las gradas.

El Valle de Egüés sigue con su gran temporada. El equipo es colíder en Primera División masculina junto a Megacalzado Ardoi y ha añadido la Euskal Kopa a sus vitrinas.

Para llegar a la final, el Valle de Egüés se deshizo en semifinales del La Salle Versia, mientras que el Ibaizabal derrotó al otro equipo navarro, el Megacalzado Ardoi.

Los de Jotas Unzué comenzaron muy bien el encuentro, finalizando el primer cuarto con una clara ventaja de 21-13.

En el segundo periodo, los dos equipos tuvieron muchos problemas en ataque y se llegó al descanso con un marcador muy bajo: 28-21.

El partido siguió muy parejo en la segunda parte, con un Valle de Egüés que iba por delante en el marcador pero que no lograba romper el partido.

Ibaizabal llegó incluso a ponerse por delante en el marcador durante unos segundos del último cuarto, pero los navarros supieron sobreponerse y cerrar el partido con relativa comodidad con el definitivo 64-53.

Así, los de Egüés se habían hecho con la Euskal Kopa, un título que sin duda les dará moral para afrontar lo que queda de temporada, con la ilusión en el horizonte de intentar ascender a Liga EBA.

Anteriormente, se había disputado la final femenina, con el duelo entre San Ignacio Premo y la Universidad Deusto Loiola Indautxu. Fue un duelo muy parejo y emocionante entre dos buenos conjuntos.

Las navarras acabaron con 4 puntos de ventaja el primer cuarto, pero al descanso se llegaba con ventaja mínima de las vizcaínas (41-42).

Un mal inicio del tercer periodo pasaba factura al San Ignacio, que veía cómo el Deusto Loiola Indautxu iba ampliando su ventaja. Aunque el equipo navarro plantó cara hasta el final, el conjunto vizcaíno no dio opción a la remontada del San Ignacio.