Iván Rosado –Huelva, 24 de abril de 1974– se ha mantenido desde la temporada 2000-2001 como el máximo realizador de Osasuna de este siglo, con 14 goles en Primera, además de ocupar el podio de goleadores históricos del equipo en la máxima categoría sólo por detrás de Julián Vergara –20 goles en la campaña 1935-36– y Sabino Andonegui –15 goles en el curso 1957-58–. Ante Budimir parece que está dispuesto a alterar el orden y la tradición y a asaltar todo lo que se le viene encima. Su gol número 15 frente al Real Madrid, todavía con nueve jornadas por delante, parece que anuncia un reto y una ilusión hasta final de campeonato.
“Han pasado 23 años desde los catorce goles que marqué en Primera con Osasuna y no me da nada de pena que Budimir haya conseguido superar esa cifra, que se haya batido ese récord”, habla Iván Rosado con el corazón, como un rojillo casi emocionado por ser parte de la historia del equipo navarro. “Ha habido muchos jugadores que se quedaron en once goles, futbolistas de talla mundial, como Milosevic, Pandiani, Urban lo hizo en varias ocasiones, otros como Ziganda u Oriol Riera, pero a catorce goles en Osasuna solo lo habíamos hecho tres, hasta ahora”.
“Para mí ha sido un orgullo tremendo llegar a esa cifra”, continúa explicando sus sensaciones. “No sólo ha sido el hecho de meter goles, sino haber estado en Pamplona, en Osasuna, jugar en el Sadar. Además, en aquella temporada la satisfacción fue doble porque no solo logré esa cifra, sino que los goles sirvieron para mantenernos en Primera. Logramos la permanencia con Lotina, fue algo muy difícil y, en mi caso, como he dicho siempre, yo me beneficié del trabajo de todos los compañeros, porque sin ellos yo no podía hacer nada. No era como Vinicius, que a veces no necesita de los demás para marcar”.
Iván Rosado considera que con Budimir en el equipo, Osasuna se encuentra en una situación histórica. “Hay que ayudar a Budimir”, afirma con seriedad. “Hay que ayudarle a que sea pichichi, a que sea el máximo goleador de la categoría. Es una oportunidad histórica para el club. El primero que se tiene que ayudar es el propio Budimir, pero también el equipo tiene que hacerlo”.
“Bellingham tiene 16 goles y está en el Real Madrid”, continúa, “pero Budimir ha demostrado que también tiene una regularidad, que está en un buen momento de forma y que lo mismo es un rematador de los de toda la vida, que hace un gran gol como lo hizo ante el Alavés. Hay jornadas y creo que debe pelear sus opciones”.
Rosado resalta la dificultad que tiene para un delantero llegar en Osasuna a una cifra importante de goles. “No es fácil, porque en Osasuna hay que trabajar mucho para el equipo. En Osasuna, tradicionalmente los delanteros han sido corpulentos y con un buen juego aéreo. Yo mido 1,74, pero siempre fui un jugador muy sufrido, de mucho trabajo, oportunista, de correr para el equipo. La temporada que llegué a los 14 goles, hice sólo uno en los trece primeros partidos, pero en los últimos 25 logré trece”.
El exatacante rojillo, que ha entrenado esta temporada a los juveniles del Recreativo y también estuvo al frente del Sporting de Huelva, de la Primera femenina, abunda en que Budimir tiene características que le hacen idóneo para Osasuna. “Es un delantero de muy buena planta, por encima de 1,90, va bien de cabeza, se mueve bien en el área, esperando su momento, pero también se sacrifica cuando el equipo lo necesita. Es un jugador muy completo y, por encima de todo, tiene gol. Osasuna hizo una inversión importante por él, pagando ocho millones de euros que es muchísimo para un club como Osasuna, pero está devolviendo con goles toda esa inversión. Ha sido un acierto tremendo. Además, estamos hablando de un jugador internacional de una selección importante como Croacia”.
“Yo creo que puede llegar a los veinte goles, porque está demostrando que está en un buen momento y que tiene muchas ganas de seguir haciendo las cosas bien”, añade.
Iván Rosado, autor de 37 goles en 154 partidos como rojillo, también reflexiona sobre el momento que vive Osasuna, un club al que no quita ojo de encima. “Hay que estar contento por cómo se está desarrollando la temporada. El equipo viene de una campaña muy buena, de disfrutar otra final de Copa y de clasificarse para la Liga Conferencia, y jugar en Europa no es fácil. Se ha sentenciado la permanencia con mucha antelación, el estadio está casi siempre lleno y eso demuestra que sigue habiendo una unión muy importante entre el equipo y la afición. Es un ambiente muy bonito que, incluso para los rivales, es algo que se disfruta porque se vive el fútbol con mucha pasión. Jagoba está realizando un trabajo impresionante, lleva seis temporadas al frente del equipo, y hay muy pocos entrenadores que puedan decir eso en un club. En Osasuna hay todo para disfrutar”.
