“Mi trabajo va a ser ayudar a Thymen Arensman y a Carlos Rodríguez a que se metan en el podio de Madrid”
Óscar Rodríguez, del equipo Ineos, se enfrenta a la Vuelta en un excelente momento de forma y ayudará a Carlos Rodríguez a conseguir la victoria
El ciclista navarro Óscar Rodríguez, de 29 años (Pamplona, 6-5-1995) recorrerá la Vuelta donde desempeñará un papel de apoyo inestimable en la alta montaña. El ex del Movistar, donde rozó la victoria de etapa en la Vuelta a Suiza en 2022 y en el Tour de Limousin en 2023, tras recuperarse de una dura caída en el Giro de Italia, además de ser segundo en la general de la Vuelta a Hungría hace dos años, buscará brillar en una competición que ya conoce.
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Rodríguez consiguió una victoria de etapa en la cima de La Camperona en la Vuelta a España 2018 cuando competía en el Euskadi-Murias y un segundo puesto en el Mont Ventoux Dénivelé Challenge de 2021, cuando estaba en las filas del Astana.
¿Cómo se siente?
Estoy bien, la verdad que he estado preparando bien este final de temporada con una concentración en altura y estoy en un buen estado de forma.
¿Cúal es el objetivo principal del equipo Ineos?
Nuestro objetivo es intentar hacer podio con Thymen Arensman y con Carlos Rodríguez. Mi objetivo personal es ayudarles lo máximo posible.
¿Cómo es su relación con los demás compañeros?
Muy buena. Me han acogido muy bien desde el primer momento y aquí no me falta absolutamente de nada. Y al final, como te ofrecen todos los medios, también son muy exigentes.
¿Seguirá muchos años en el Ineos?
A mí me gustaría. Creo que es el equipo que mejor cuida al ciclista con diferencia. Además, el Ineos, en cuestión humana es un equipo excelente.
¿Cúal es su idea de la Vuelta?
La Vuelta es durísima este año. Hay muy pocas etapas llanas y la media de desnivel son de 3.000 metros, una barbaridad. Pinta muy dura.
¿Cúal va a ser su trabajo?
Mi trabajo va a ser ayudar a Carlos y a Arensman que se metan en el podio de Madrid.
¿Cómo ha sido su preparación?
La preparación ha sido muy buena, ya te digo que estuve en altura tres semanas con el equipo en Andorra y yo creo que llego en un punto óptimo de forma.
¿Cuáles son los posibles rivales más fuertes?
No he mirado mucho la lista de participantes, pero bueno, gente como Roglic es muy favorita. También Enric Mas siempre va a estar ahí disputando la general. Sepp Kuss la ganó el año pasado y viene de ganar la Vuelta a Burgos. Rivales van a aparecer muchos...
¿Se ve al nivel de hace 6 años cuando ganó la etapa en la Vuelta 2018?
Me veo en más nivel, sí. Cada año he ido adquiriendo un poco más de nivel y creo que es el mejor momento de mi carrera deportiva.
¿Considera la Vuelta de este año como uno de los mayores desafíos a los que se ha enfrentado?
No, ni mucho menos. Al final es dura, pero, extradeportivamente, todos hemos tenido desafíos mucho más difíciles que correr carreras de bicis.
¿Cómo maneja la presión ante las expectativas?
No, yo no tengo presión. La única presión es la que yo me pueda meter yo mismo. Al final, soy un corredor que no tiene el deber de ganar una clasificación general, pero sí tiene el deber de dar lo mejor de sí. Como depende mí, no tengo ningún método para llevar mejor la presión.
¿Qué opina del recorrido?
Los sprinters van a tener muy pocas posibilidades, la verdad. Como ya he comentado, es una carrera muy dura.
¿Tiene algún amuleto o ritual antes de las carreras?
Fíjate, el otro día estuvimos hablando de eso, si alguno tenía manías y tal, y yo la verdad es que todas las manías que he tenido me las he intentado quitar. Entonces, a día de hoy no tengo ni amuletos ni nada. Sí que es verdad que antes de salir a la etapa, me gusta despedirme de mi pareja. Le mando un mensaje y ya salgo tranquilo. En una carrera pueden pasar muchas cosas y prefiero despedirme. Luego, cuando llegue al bus, otra vez de nuevo escribirle.
¿Cómo se recuperan entre cada etapa de la Vuelta?
Llego al bus, como arroz, aunque por ejemplo otros comen pasta, y vas tumbado tranquilamente hablando por teléfono o lo que sea. Cuando llegas al hotel te dan un masaje de más o menos una hora y a cenar. Después de cenar, a dormir. Nos hacen la colada así que no tenemos que preocuparnos de nada más.
¿Cúal cree que será la clave para ganar la Vuelta?
Aprovechar nuestras oportunidades y los puntos flacos de los rivales, creo que eso va a ser lo más clave.
¿Cómo se encuentra en cuanto a las lesiones que ha sufrido?
Tuve una lesión de un golpe en el riñón que me di el año pasado y eso ha quedado totalmente solucionado, aunque lo sigo recordando porque viene bien para no cometer los mismos errores.
¿Qué balance hace de las últimas competiciones?
Han sido muy buenas. No he estado a un nivel estratosférico, pero si muy constante que es lo que me pedía el equipo. Muy contento con la valoración general de las carreras.
¿Seguirá muchos años más compitiendo?
Sí, hasta que me aburra o me echen de aquí me encantaría seguir compitiendo todo lo que pueda.
Si consigue la victoria, ¿a quién dedicaría su triunfo?
Se lo dedicaría a la familia porque no es nada fácil ser familia de un ciclista profesional. Por lo general, estás mucho rato fuera de casa y tienen que tener mucha paciencia.