HELVETIA ANAITASUNA (13+13) Bols (portero), Gastón (2), Meoki, Héctor González, Chocarro (1), Fischer (1) y Ander Izquierdo (8, 1p) -siete inicial-. También jugaron Cancio (portero), Edu Fernández (4), Martín Ganuza (1), Etxeberria, Torriko, Aitor García (5) y Juan Del Arco (4).

RECOLETAS ATL. VALLADOLID (12+13) César Pérez (portero), Ugarte (8), Adrián Fernández (2), Patrianova (2), Miguel Martínez (4), Jorge Serrano (5, 2p) y Miguel Camino (1) -siete inicial-. También jugaron Nicolás López, Daniel Pérez (1), Roberto Pérez (1) y Víctor Rodríguez (1).

Marcador cada cinco minutos 4-0, 6-3, 8-4, 11-6, 12-9 y 13-12 (descanso); 13-13, 15-15, 18-19, 20-21, 22-22 y 26-25 (final).

Árbitros Óscar Raluy y Ángel Sabroso. Excluyeron dos minutos a los locales Héctor González, Torriko, Fischer y Cancio; y a los visitantes Manuel García y Miguel Camino (2). Además, descalificaron con roja directa a Nicolás López, por una acción sobre Del Arco.

Pabellón Anaitasuna. Unos 540 espectadores. Antes del partido, el club homenajeó a Ander Ugarte. Los jugadores de la base Endika Longás y Jone Hijosa, junto a Aitor García, le impusieron un pañuelico rojo. Además recibió su camiseta con el número 24, firmada, de manos del capitán Chocarro y de la presidenta de la Sociedad, Mertxe López.

- Un gol de Aitor García a escasos diez segundos para el final, cuando el marcador reflejaba un empate a 25, dio ayer la primera victoria del año al Helvetia Anaitasuna ante un Valladolid al que costó doblegar, que puso en jaque a los navarros con sus variantes defensivas y le hizo sudar tinta para amarrar los puntos.

El tanto del joven canterano, que va ganando credenciales partido tras partido, desniveló una balanza entre dos equipos que llegaban parejos en la tabla y que protagonizaron un encuentro intenso, con ritmo y alto nivel defensivo. Y eso que el inicio de partido tuvo un color claro, el de Anaitasuna. El equipo navarro, sin Antonio Bazán lesionado, saltó con rasmia a la pista y pronto protagonizaba un parcial 4/0, con Ander Izquierdo de trigoleador, que obligó a Pisonero a solicitar su primer tiempo muerto cuando apenas habían transcurrido cinco minutos. Pese a la ausencia del pivote de Zizur, el Helvetia defendía intenso, su juego rápido, dinámico, de cruces, con velocidad en la circulación desconcertaba a los vallisoletanos, y se hacía dueño del partido.

Las tornas cambiaron cuando el técnico del Valladolid optó por romper ese dominio en ataque con una defensa 5/1, una variante que mantendría durante prácticamente el resto del choque. Y este sistema hizo daño. Anaitasuna pasó de gozar de rentas de hasta seis goles (10-4, m.16) a ver cómo su rival iba menguando esa distancia, gracias a su zaga, a un ataque bien dirigido por Adrián Fernández y perfectamente culminado desde los extremos. Con este panorama, los navarros llegaban con una mínima ventaja al descanso (13-12).

Los dos equipos se atascaron en el comienzo de la segunda mitad. César Pérez, el meta vallisoletano, era uno de los artífices de esta situación para los suyos. Y pronto Ugarte, espectacular desde los 6 metros en este período, adelantaba al rival (13-14, m.36). Empezó entonces la lucha de Anaitasuna por perforar la 5/1 de Valladolid. Lo intentaba con Edu y Ander Izquierdo. Los de Pisonero respondían. La alternancia de goles, el ritmo y el equilibrio en el marcador se mantenía. Hasta que con ese 25-25, a falta de diez segundos, Aitor García se la jugaba, asumía la responsabilidad y no fallaba. Victoria de Anaitasuna y dos puntos de oro.