Barcelona - El defensa del Barcelona Gerard Piqué aceptó ayer el pago de una multa de 48.000 euros por un delito contra la seguridad del tráfico, por conducir su vehículo sin puntos en el carné el pasado mes de agosto.

En un juicio rápido celebrado ayer en el juzgado de instrucción número 27 de Barcelona, Piqué se conformó con una pena de multa y ha saldado así la causa que tenía abierta por un delito contra la seguridad del tráfico, después de que la Guardia Urbana lo sorprendiera el pasado mes de agosto conduciendo sin puntos en el carné.

El defensa azulgrana se entrenó con total normalidad, junto al resto de sus compañeros, en la Ciudad Deportiva Joan Gamper.

Tras la sesión de entrenamiento, se trasladó, acompañado de su abogado David Vázquez, a la Ciudad de la Justicia de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), donde había sido citado a las 13.00 horas.

Piqué llegó puntual a la cita y abandonó los juzgados quince minutos después, sin querer hacer declaraciones y tras aceptar la pena impuesta por el magistrado Francisco Javier Paulí, que redujo en un tercio la propuesta inicialmente por el ministerio fiscal: 72.000 euros de multa, a razón de 200 euros diarios durante doce meses. Al futbolista catalán le paró la Guardia Urbana de Barcelona el pasado 31 de agosto, a las 14:05 horas, por haber cometido una infracción de tráfico cuando conducía su vehículo por el Paseo de Gracia. El jugador “conducía pese a tener conocimiento de que no podía hacerlo, por pérdida de vigencia del permiso de conducir por haber agotado el saldo total de los puntos asignados, en virtud de expediente iniciado en fecha 13 de julio de 2017”, precisa la sentencia. - Efe