pamplona - El árbitro del partido San Javier-Castejón, de Segunda cadete de los Juegos Deportivos de Navarra, celebrado en Tudela, solicitó la presencia de la Policía Municipal al temer “por su integridad”, según se dio a conocer ayer en un comunicado. Añade que no hubo intervención, pero los agentes se quedaron hasta que terminó el acta.

Según la nota, el colegiado tuvo “un problema con varios padres y un entrenador durante el encuentro de fútbol”. El partido concluyó con el resultado de 2-2 y no era trascendente en la clasificación para ninguno de los contendientes.

Desde el San Javier señalaron que “el entrenador tuvo una discusión con el colegiado. Por lo que nos ha trasladado, había un jugador que necesitaba atención en el campo y entró en el terreno de juego, ya que tenía problemas para poder respirar bien. Eso desencadenó la discusión”. En el club de Tudela insisten en que “en el club estamos en contra de actos no deportivos que se puedan producir en un terreno de juego. No entra en nuestra forma de entender el deporte. El comportamiento tiene que estar siempre por encima de los resultados”.

Uno de los testigos del encuentro comentó que “en un lance del partido, cuando el resultado era de 1-2, en la segunda parte, el entrenador del San Javier actuó como un energúmeno y descalificó al árbitro. Fue expulsado. El ánimo del entrenador encendió a los chavales. Aun así, el partido se terminó y una vez en el vestuario el árbitro llamó a la Policía Municipal”.

Desde el Castejón se insiste en que “en el fútbol base, se trata de formar jugadores. En nuestro club juegan todos y no le damos tanta importancia al resultado en estas categorías. Los entrenadores tienen que dar ejemplo a los chavales”. - D.N.