MIRANDÉS 4 Limones, Alexander, Odei, Sergio, Franquesa (Kijera min 84), Malsa, Antonio Sánchez, Álvaro Rey, Álvaro Peña (Guridi min 67), Merquelanz y Matheus Aias (Marcos André min 78).

VILLARREAL 2 Andrés Fernández, Mario, Funes Mori, Sofian Chakla (Rubén Peña min 46), Xavier Quintillá, Samuel Chukwueze (Paco Alcácer min 64), Anguissa (Moi Gómez min 70), Cazorla, Ontiveros, Gerard Moreno.

Goles 1-0 m.17: Matheus Aias. 1-1 m.32: Ontiveros. 2-1 m.45: Merquelanz (p). 2-2 m.55: Cazorla (p). 3-2 m.58: Odei. 4-2 m.91: Antonio Sánchez.

Árbitro De Burgos Bengoetxea Colegio vasco). Amonestó por el conjunto local a y por los visitantes a Iborra (m.34), Chakla (m.37), Mario Gaspar (m.51), Chukwueze (m.63) y Cazorla (m.77).

Estadio Anduva. 4.528 espectadores (unos 100, del Villarreal).

Miranda de Ebro (Burgos) - Un Mirandés imparable eliminó al Villarreal y se plantó en semifinales de la Copa del Rey por segunda vez en toda su historia. Merquelanz fue el jugador determinante para los rojillos que de nuevo repiten la hazaña de la temporada 2011/2012. El Mirandés llega a la penúltima ronda (en la que ya tendrá que jugar eliminatoria de ida y vuelta) tras haber tumbado a tres Primeras: Celta, Sevilla y Villarreal.

El equipo burgalés se adelantó hasta tres veces ante un Villarreal que quiso mandar pero se encontró con un anfitrión bien colocado en el terreno de juego, que presionaba desde arriba la salida de balón y que robaba balones que convertía en ocasiones.

Tras llegarse con 2-1 al descanso, Cazorla logró el empate a 2, pero el alivio duró poco al Villarreal, porque Odei consiguió marcar tres minutos después (3-2, minuto 58).

El Villarreal se volcó entonces en busca de un nuevo empate, y tuvo varias ocasiones para hacerlo, pero Limones salvó al equipo rojillo en varias ocasiones, siendo providencial para el equipo de Iraola.

El tiempo se acababa para los de Javi Calleja y empezaron a achuchar en busca de la prórroga, dejando demasiados huecos atrás, y, ya en el descuento, Antonio Sánchez cerró la eliminatoria con el cuarto gol local, que desató la locura en las gradas de Anduva. - Efe