l Club Atlético Osasuna ha cerrado otra semana de trabajo con el regreso de La Liga Santander en el horizonte. El conjunto rojillo descansará hoy después de haber encadenado seis jornadas de entrenamientos de forma consecutiva, en los que los jugadores rojillos han podido ejercitarse divididos en tres grupos diferentes.

Anteriormente, el entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate ya había dirigido siete sesiones individuales con los jugadores, por lo que en total ya son trece las jornadas de trabajo que acumula el equipo navarro.

La sesión de ayer no tuvo tanta carga física como la del viernes. La jornada se desarrolló a través de técnica, rondos, posesiones y finalizaciones. El primer grupo inició el trabajo a las 9.30 horas, mientras que la última unidad se ha retirado de las instalaciones a las 12:00 horas.

Tras la jornada de descanso de hoy, Osasuna volverá a entrenar mañana partir de las 9.30 horas. Está previsto que la próxima semana, los equipos de La Liga continúen en la fase 3 de su protocolo, que permite entrenamientos colectivos de un máximo de diez deportistas, por lo que la plantilla continuará dividida en tres grupos. Los entrenamientos seguirán siendo a puerta cerrada de acuerdo al protocolo sanitario del Consejo Superior de Deportes.

El conjunto israelí del Maccabi Haifa anunció ayer la salida del lateral Lillo. El exrojillo dejó Osasuna en el pasado mercado de invierno rumbo al equipo israelí, con el que tan solo ha disputado un encuentro desde su llegada en enero.

Manuel Castellano Castro, apodado Lillo, se desvinculó de Osasuna en enero pese a que tenía contrato con el conjunto navarro hasta junio. El lateral llegó en 2017 a Osasuna con la carta de libertad tras haber jugado previamente en el Sporting de Gijón. Con el equipo navarro disputó 63 encuentros, 57 en Segunda División, cuatro en Primera y dos en Copa del Rey. Con Osasuna, Lillo logró el ascenso la temporada pasada, pero dejó de contar para Jagoba Arrasate desde la llegada del equipo a Primera División.

La salida del lateral de Osasuna estuvo marcada por la polémica, ya que el club israelí anunció de forma oficial la incorporación del jugador valenciano antes de que este se desvinculase del conjunto rojillo, un anuncio que la entidad navarra desmintió, pese a que finalmente el jugador terminó desvinculándose de Osasuna y terminó visitiendo la camiseta del equipo de Haifa.