El entrenador navarro Dani Blanco (02/10/1967) ha fichado por el equipo femenino Pachuca de la Primera División mexicana como segundo entrenador de la asturiana Toña Is, con la que mantiene una amistad al haber formado parte de su equipo técnico anteriormente

¿Cómo le contactaron desde el club para ir a entrenar?

-Fue la entrenadora Toña Is la que me contactó. Con ella mantengo una relación buena desde la selección y ahí se forjó una amistad desde hace dos años y pico. He estado ayudándole siempre en algunas cosas, entonces se ha ido manteniendo el contacto y el trabajo entre nosotros. Siempre he pertenecido a su cuerpo técnico y este año le han permitido que yo viaje a México con ella, porque el año pasado no nos dejaron.

¿Por qué no le dejaron llevar a un segundo entrenador?

-Por motivos de club. Pensaron que era suficiente con ella, ya que tenían técnicos para ayudarle; pero al final el segundo entrenador es una figura muy importante y tiene que ser de plena confianza. Toña estuvo presionando para que yo pudiera estar allí con ella y han cedido finalmente.

¿Hace cuánto le dijo Toña que fuera con ella?

-Veníamos dándole vueltas desde diciembre del año pasado cuando le ficharon a ella para el campeonato de Clausura. Estuve ayudándole desde España en visionado de partidos, en análisis y ese tipo de cuestiones.

¿Cuál fue su reacción al ver que por fin iba a poder ir allí?

-Siento mucha responsabilidad porque ya voy a un equipo profesional con jugadoras internacionales. También tengo muchas ganas de desarrollar lo que es mi talento, que creo que tengo.

¿Le ha costado decidir si ir o no?

-No, nada. La única traba era la cuestión familiar, pero mi mujer y mis hijos me han apoyado desde el primer momento. Aunque bueno, luego está la empresa que tengo con mis hermanos, en la que hubo que dejar todo bien y poner las cosas en su sitio.¿Cuánto tiempo estará allí?

-A ella le quedan 6 meses de contrato y yo voy para ese tiempo, que es el campeonato completo. Una vez esté allí ya veremos si ella sigue o no o si a mí me gusta o no me gusta. Pero bueno, son preguntas que todavía no me hago, primero vamos a comer y luego ya tendremos tiempo de cenar.

¿Qué objetivo tiene una vez en México?

-Mi mayor objetivo era tener la posibilidad de estar en un equipo profesional, era una ilusión que tenía y la he conseguido. En México mi finalidad es ayudar a Toña y trabajar duro. A nivel de equipo tengo todas las expectativas posibles para poner al Pachuca en lo más alto.

¿Les ha visto jugar?

-Sí, conozco la plantilla de arriba a abajo y no solo la plantilla, sino toda la liga. He visto todos los partidos de Pachuca y de los rivales, conozco a los clubes, entrenadores, jugadoras, etc.

¿Qué es lo más importante que tiene que tener un buen equipo?

-Valores. Un equipo tiene que tener valores deportivos y valores personales y, a partir de ahí, ya puedes construirlo. La victoria no tiene que ser el último fin, no vale ganar a cualquier precio o sin merecerlo. Yo no entiendo el deporte si no está rodeado de principios y respeto a lo que es la persona. Estamos entrenando seres humanos, no números. Los entrenadores trabajamos con personas y eso a veces se olvida.

¿Cuál es su mayor talento como entrenador?

-Una de las facetas de entrenador que más domino es el tema de escuchar, de saber detectar la psicología de la jugadora y saber lo que necesita. En el Ardoi, lo que fue la conexión en el grupo y el trato con las jugadoras fue un gustazo. Conseguimos hacer un gran equipo y que todos tiráramos del carro, lo cual fue fruto de ese trabajo psicológico. En eso es en lo que más fuerte me veo, en detectar y solucionar esas vivencias que hay dentro de un vestuario.¿Cómo está el fútbol femenino en México? ¿Hay afición?

-Hay un seguimiento tremendo y los partidos se juegan en los estadios principales del país con 20.000 personas viéndolos. La verdad que es un fútbol que, deportivamente le queda un poco, pero en cuanto a seguimiento es increíble. Allí se siente mucho el fútbol y los clubs tienen años y años de vida, por ejemplo, el Pachuca tiene 107 años más o menos.

¿Alguna vez se había planteado salir de España para entrenar?

-No, no tenía como objetivo salir fuera. Cuando surgió mi relación con Toña es cierto que me abrí a salir de casa para encontrar un banquillo en Liga Iberdrola, aunque no se ha dado. No me lo había planteado, pero bueno, tampoco es mucho tiempo y no es muy complicado.

¿Por qué decidió dedicarse al fútbol femenino?

-Porque tengo tres sobrinas jugando a fútbol: dos en Osasuna de Reto Iberdrola, María Blanco y Nerea Salinas; e Irene Gaztelu que juega en el Mulier de Primera Nacional. A partir de que cogí el equipo de la selección navarra sub-15 y estuve tan a gusto, me entró ese gusanillo y pasión por el fútbol femenino. No tiene nada que ver con el masculino y fue mi válvula de escape de este. El masculino me costaba más por la competitividad y el egoísmo que había, lo cual me desenganchó un poco del fútbol. Hoy en día no quiero otra cosa que no sea el fútbol femenino.

¿En qué se diferencian el fútbol masculino y el femenino?

-En el fútbol masculino ya se pisotean los valores, no se miran a los jugadores si pertenecen a un club o a otro, los padres se entrometen, algunos jugadores se creen más de lo que son, etc. Ese ambiente me frustró mucho. El femenino es más sano porque no hay todavía esa picaresca que hay en el masculino. Sí que es cierto que los equipos femeninos ya se exigen más, pero no se observan esas actitudes no deportivas. Al final, aquí estamos luchando todos por lo mismo, que es sacar el fútbol femenino adelante. Ahí no hay trampas, es más entrañable.

¿Un mejor momento que le ha dado el fútbol?

-Entrenar en Ardoi. Allí encontré un grupo de chavalas majísimas, unas chicas que me devolvieron la ilusión. Me quedo con esa alegría e ilusión.¿Y el más amargo?

-Puede que el de la selección navarra. Fue un momento de incomprensión por parte de la Federación en el que puede que yo no estuviera a la altura y me dolió bastante. Más que me dijeran que no seguía, fue el hecho de que me sentí incomprendido.

¿Piensa seguir vinculado al fútbol mucho tiempo?

-No me planteo dejarlo. Tengo una edad que me permite seguir ligado al fútbol. Los entrenadores que tenemos x edad y que podemos considerarnos mayores, si seguimos trabajando, continuaremos estando muy capacitados. Los entrenadores jóvenes vienen pisando fuerte, pero quieren llegar a la meta antes de pasar por algunas situaciones. Esto lo digo para la gente que va cumpliendo años y sienten que están de más, porque para nada es así. Se puede entrenar a cualquier edad, solo hace falta formarse y tener motivación.

Nacimiento. 2 de octubre de 1967 en Pamplona.

Carrera futbolística. Como jugador, entrenador, empleado o directivo; ha pasado por Oberena, Osasuna, Mutilvera, Ardoi y la selección navarra sub-15. En julio de 2021, se encamina a México para dirigir como segundo entrenador el Pachuca Femenino, equipo de la Primera mexicana. Será la mano derecha de la entrenadora Toña Is, con la que mantiene una amistad desde hace años

Fuera del fútbol. Es gerente de una empresa de tapicería para automóviles llamada Tapibus. La lleva junto a sus hermanos, con los que ha tenido que organizar todo para marchar a México.

"Yo no entiendo el deporte si no está rodeado de principios y respeto a lo que es la persona. Entrenamos seres humanos, no números "

"Aquí estamos luchando todos por lo mismo, que es sacar el fútbol femenino adelante. Ahí no hay trampas, es más entrañable"