pamplona - El baloncesto base navarro tiene viene arrastrando un problema con el arbitraje, sobre todo en las categorías inferiores. Un problema con diferentes aspectos. En primer lugar, lo más claro: no hay suficientes árbitros. En segundo, los entrenadores y jugadores, así como su entorno, no consideran a los árbitros como parte del juego ni como deportistas.

Esta situación podría afrontarse de diferentes maneras, pero desde la Federación Navarra de Baloncesto se ha optado por llevar a cabo una medida rompedora y pionera: hacer que los propios clubes, a través de sus jugadores, los que se encarguen de arbitrar por turnos en sus propios partidos.

La idea de la Federación, en connivencia con el colegio y la escuela de árbitros y con varios clubes -Liceo, Navarro Villoslada, San Ignacio Mendillorri y Mutilbasket-, es que en categoría Preinfantil sean los propios jugadores quienes arbitren sus partidos. La fórmula todavía está pendiente de aprobarse, pero se pretende que varios jugadores arbitren en cada partido, de manera que los jugadores piten y jueguen en cada uno de ellos.

Con esto se persiguen varios objetivos. En primer lugar, se solucionaría en buena medida el hecho de que falten árbitros. Otro punto importante es el conseguir que se perciba al árbitro como parte del deporte, así como mejorar el conocimiento de las normas, tanto para jugadores como para familiares, además de fomentar valores como el respeto a las reglas o la honradez.

Lograr establecer esto no será algo sencillo, ya que precisa de la participación tanto de jugadores, como de entrenadores, padres y madres. Desde la Federación plantean llevar a cabo guías de arbitraje para la categoría, con charlas explicativas para tanto los clubes como para los padres, o jornadas de formación para los jugadores, y para los entrenadores, de manera que puedan aplicar en sus entrenamientos ejercicios específicos relacionados con el arbitraje.

No será una tarea fácil para la Federación, como reconoce su presidente, Pablo Bretos. “Tenemos trabajo con los clubes para poner en marcha el año que viene esto en la categoría Preinfantil. Nuestra tarea es convencer de esto a todos los clubes. Lo hemos hecho en colaboración con varios de ellos, pero tenemos que llegar a todos. Creo que el proyecto es muy interesante”, manifiesta.

una idea de futuro Tampoco pretenden quedarse en este año, sino que se busca ir ampliando esta iniciativa. “La idea sería, si pudiera ser, darle continuidad el año siguiente con los chavales que pasen de Preinfantil a Infantil, e introducir de nuevo a los preinfantiles, de manera que, hasta Cadete se pudiera implementar. También queremos que los chavales que están en la Escuela de Árbitros pasen a arbitrar en categoría cadete, ayudados por coordinadores, o por árbitros del Comité de Árbitros, para que se puedan ir incorporando”, explica Bretos.