Ha empezado ya la temporada y con ella vuelvo a asomarme a estas páginas para comentar, desde el punto de vista arbitral, algunos aspectos que puedan resultar de cierto interés. Mi objetivo viene siendo doble durante estos cursos: intento por un lado difundir las Reglas de Juego y su aplicación para que puedas, estimado lector o lectora, basar tu opinión de manera fundamentada en la actual reglamentación, pero hay una segunda intención más ambiciosa que consiste en divulgar el espíritu del juego limpio, en pedirte que mires este juego con cariño y participes, en la medida de lo posible, en un intento de alejar los malos modos de los recintos deportivos, sobre todo cuando en ellos se encuentren niños y jóvenes.

Tanto el Comité Técnico a nivel nacional como el Comité Navarro en el ámbito territorial hemos mantenido reuniones con los clubes para ponerlos al día sobre los cambios que se han producido en las Reglas, debo resaltar el interés y la participación de directivos, entrenadores y jugadores en las que he tenido oportunidad de participar. En sucesivos artículos iremos desgranando estos cambios normativos.

Seguramente lo que más ha llamado la atención en este inicio de temporada es la firmeza de los árbitros al castigar con tarjeta roja esas entradas por detrás sobre el gemelo o el tendón de Aquiles del adversario. No hay en ello un cambio de reglamento sino una directriz dada a los árbitros con el fin de proteger el juego y a sus principales protagonistas.

Se ha argumentado que este criterio puede ser excesivamente rígido sobre todo porque en algunos casos no parece haber en el infractor una intención manifiesta de causar daño, sin embargo lo que parece claro es que este tipo de entradas resultan muy peligrosas y suponen un claro riesgo de lesión grave, por eso no resulta suficiente con que el jugador no muestre mala intención en su acción, es preciso, además, que tome las medidas oportunas para no poner en riesgo a su adversario.

Los árbitros deben diferenciar entre esas entradas con el pie en alto y la suela levantada de esas otras que pisan el pie del adversario en la disputa del balón. Castigarán las primeras con expulsión y las segundas con amonestación.

Con la temporada comienza también nuestra campaña de captación de nuevos árbitros y sobre todo árbitras, el plazo de inscripción ya está abierto, hablaremos la próxima semana sobre ello.

El autor es Vocal de Formación y Relaciones Sociales del Comité Navarro de Árbitros de Fútbol