El presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Jean Todt, ha dicho que mantiene el contacto con el heptacampeón alemán de Fórmula Uno Michael Schumacher y lo visita regularmente.

"Su lucha continúa, junto a su familia y sus médicos", dijo Todt en una entrevista con el periódico neerlandés "De Telegraaf" publicada este fin de semana. "Voy a verlo con regularidad y vemos la televisión juntos", añadió.

Schumacher sufrió en diciembre de 2013 un grave accidente de esquí y, desde entonces, han trascendido pocos datos sobre la evolución de su estado de salud.

El hijo del heptacampeón, Mick Schumacher, es piloto de Fórmula 2 con 21 años y estuvo a punto de debutar en la Fórmula Uno a principios de octubre.

Todt no quiso responder si Michael Schumacher es consciente de la prometedora carrera de su hijo. "No voy a hablar sobre eso, no quiero entrar en detalles porque es algo privado", explicó.

El presidente de la FIA dijo que Mick Schumacher es un piloto "joven y con talento" y que tiene "un gran nombre", aunque advirtió que "los grandes nombres no conducen el coche".

"Si se estrena en la Fórmula Uno, aún no tiene un coche ganador. Necesitará tiempo, es muy pronto para saber si tiene el mismo talento que su padre, Max Verstappen o Lewis Hamilton", comentó.

Todt es miembro de la junta de la fundación "Keep Fighting", creada por la mujer de Schumacher, Corinna, y dijo que "lo que hace ella es increíble".

Puso como ejemplo una de las iniciativas de la institución, un casco para motociclistas de países en vías de desarrollo. "Son mucho más seguros y asequibles, cuestan menos de veinte dólares. Siempre tenemos a Michael en mente con proyectos así", dijo el presidente de la FIA.