pamplona - Se acabaron los trámites previos. El cestaño para la final del Campeonato del Campeonato de Parejas de Promoción ya está configurado tras la elección de material realizada esta mañana en el frontón de la capital navarra y los cuatro protagonistas velan armas de cara al choque del sábado.

Los pelotaris del dúo de Baiko Pilota ya saben lo que es disputar una final; en el caso de Asier, defiende título tras ganar la edición de 2018 en compañía de Iturriaga, mientras que Rubén jugó la de 2017 con Peña II y tuvo que conformarse con el subcampeonato.

El delantero de la Rotxapea piensa que “si hacemos bien lo nuestro, tenemos opciones de ganar. Hemos firmado un buen campeonato y esta final es la guinda pero falta la txapela. Está muy bien jugar en casa como es mi caso. Habrá un buen ambiente”.

Por su parte, el zaguero de Fuenmayor afirma sentir una alegría desbordante. “Para mí supone una gran ilusión jugar esta final. Hemos hecho un buen torneo y tenemos esperanzas de ganar este partido. Oier tiene mucho mérito al llegar a una final con tan sólo tres meses en profesionales, tiene una buena derecha y apenas falla”.

Por el lado contrario, Aitor Elordi señaló que “después de tres años en semifinales es la primera vez que llego a una final. Es el objetivo de todos lo pelotaris que entrenamos día a día. Es verdad que en la liguilla los mejores fueron Peio Etxeberria y Beñat Garmendia. Yo me obsesioné con ayudar a Oier y entraba a casi todo. Cuando conseguimos la clasificación para semifinales, hablé con Oier y cambié de mentalidad y nos salieron mejor las cosas. Además hay que destacar que Oier está recién debutado y ha hecho un gran campeonato”.

Por último, su compañero concluyó reconociendo que “Agirre y Salaverri son la pareja a batir. Es una pareja muy dura. Regalan muy poco. Una de las claves será quitar pelota a Agirre, que no perdona. Los últimos años se me hicieron muy duros”. - D.N.