- El teléfono de Joseba Ezkurdia no paró de sonar ayer durante todo el día. Numerosas entrevistas y horas respondiendo a los medios de comunicación antes de la final del Parejas. Un tramite necesario en estos días antes de centrarse al cien por cien en el encuentro del domingo.

¿Se acostumbra a este tipo de jornadas mediáticas?

-La verdad es que sí. Estoy contento de tener otro día así, creo que es bonito. Disfruto mucho, es lo que toca y ojalá de aquí en adelante haya muchos días como este.

¿Cómo se encuentra a menos de una semana para la final del domingo?

-Ayer (por el lunes) hicimos un buen entrenamiento y las sensaciones fueron buenas. Estoy contento con eso, cada día que pasa me siento mejor, hago las cosas mejor y me quedo con eso. De cabeza podría estar mejor. Creo que todavía no estoy mentalizado al cien por cien de la situación y lo qué hay en juego. Poco a poco hay que ir mentalizándonos de que el domingo es un gran día, es una final y hay que prepararse.

¿Es difícil abstraerse de todo lo que rodea a esta final?

-La cabeza en vez de estar solo a una cosa, a preparar la final y a hacer las cosas lo mejor posible, está a mil cosas. Eso es lo difícil, controlar eso. Tengo claro que si quiero ganar el domingo, tengo que dejar estas cosas de lado y centrarme en lo mío. Poco a poco voy mentalizándome de que el domingo es un gran día y hay que jugar serios para intentar ganar. Con todo lo que está pasando y la situación en la que está la pelota, es difícil.

Esta situación de la pelota es algo que no depende de ustedes y llega desde la otra empresa.

-Es así. Nosotros estamos negociando con nuestra empresa, hablando y eso es lo que hay que hacer, los otros no están haciendo eso y es lo triste. No están llegando a ningún acuerdo y todo suma, todo afecta. Cada semana que pasa la cosa parece que va un poco peor. La imagen que está dando la pelota no es buena y a ver si entre todos le damos la vuelta a esto.

Y a todo esto se suma el positivo por covid-19 de Martija.

-Otro batacazo. Sobre todo para él ha sido duro. Al principio le entró el bajón, como es normal, porque es su primera final y tiene la opción de tener la primera txapela. Que no pueda disfrutar de estos días, que es lo bonito y te ponen esa chispa dentro, me da mucha pena por Julen. No está disfrutando como merece.

¿Qué tal cree que está su compañero?

Ya está más animado porque es optimista. Pero al principio pensábamos que no iba a llegar y es duro porque es un batacazo que no tengas la oportunidad de disputar una final.

Reconoció desde que salió la noticia que quería jugar con Martija.

-Sin duda. En noviembre del año pasado empecé con Julen a jugar este campeonato y tengo que acabarlo con él. Es lo suyo. La empresa ya sabe lo que pienso. Por mí aplazaría la final una semana o dos, lo que haga falta, pero los finalistas son los finalistas y la final la tienen que jugar los protagonistas. No veo bien ni lógico que la ley esté así. Aunque soy optimista y creo que Julen va a jugar, si no lo hace me daría mucha mucha pena.

¿Piensa que si fuera su primera final llevaría peor todo esto?

-Sin duda. Si fuera mi primera final, todo lo que está pasando lo llevaría muy mal. Estoy tranquilo porque en las finales anteriores y en las citas importantes, rindo bien. Me siento tranquilo y confío mucho en mi mismo actualmente. Me quedo con eso. Cuando he tenido partidos importantes, he rendido bien y eso me da confianza.

Buenas sensaciones y buenos resultados en las finales, con tres de tres txapelas ganadas.

-Por ahora sí, creo que tengo una buena media, no me quejo (risas). En los partidos importantes, ya desde que empiezo a calentar el físico me siento muy cómodo y eso me tranquiliza. El día anterior paso tranquilo, duermo bien y todo eso ayuda a estar mas confiado en mi.

¿Cree que todo lo que rodea a esta final está minimizando su importancia?

-Pienso que ahora, como es normal, se está hablando menos del campeonato por todo lo que está ocurriendo. Pero es muy difícil jugar finales, ganar txapelas y de aquí a diez años da igual el cómo o qué paso, la gente se acordará de quién salió campeón. El objetivo es ganar la txapela, estar ahí muchos años peleando por los títulos. Eso es lo bonito, lo que genera la competición por dentro, esos nervios son una inyección de moral y el objetivo es estar muchos años ahí. Ojalá lleguemos bien el domingo y podamos ganar esa txapela.

Para ello deberán derrotar a Aimar Olaizola y Mikel Urrutikoetxea.

-Es un partido muy difícil y el otro día nos pasaron por encima. De tres partidos nos ganaron dos. Sin embargo, en la primera vuelta ganamos y tenemos que mirar ese partido si queremos ganar. Creo que jugamos un gran partido en Eibar y tenemos que jugar así. Hacer las cosas bien, intentar poner nosotros el ritmo y hacer daño con eso. Tenemos enfrente una pareja que defiende un montón, que hace las cosas bien y que en los partidos importantes, rinden. Tenemos que estar al cien por cien para poder ganar.

Además tienen mucha experiencia.

-Son pelotaris veteranos que cuando llega una cita importante dan lo suyo y rinden. Tenemos que hacer lo mismo. Julen es novato y para mí es la cuarta final. Sé que si no hacemos las cosas como nosotros sabemos, no tenemos nada que hacer. Si no olvidamos todo lo que está pasando fuera de la cancha y no lo dejamos aparte, no vamos a rendir. Tenemos que concentrarnos en la cancha para poder dar el cien por cien y tener opciones.

"La cabeza en vez de estar centrada solamente en una cosa, en preparar la final, está a mil cosas"

"En noviembre del año pasado empecé con Julen a jugar este campeonato y tengo que acabarlo con él"

"Cuando he tenido partidos importantes, he rendido bien y eso me da confianza. Me siento tranquilo"