pamplona - Asientos Esteban, una de las fábricas más antiguas de Navarra, se encuentra en el camino de recuperar parte de su antiguo vigor. La dirección en Navarra de la multinacional alemana Aunde, su actual propietaria a través de Isringhausen, ha comunicado al comité la adjudicación provisional nuevas línea de producto que permitirían a lo largo de los próximos tres años duplicar la plantilla.
La decisión se encuentra pendiente de la firma de un acuerdo laboral con el comité de empresa que garantice la competitividad de la fábrica navarra, que en los últimos años ya ha afrontado una reestructuración profunda. Este nuevo pacto laboral garantizaría que el nuevo producto se fabrique en Navarra con éxito y con el margen de rentabilidad que pide la dirección de la multinacional. En la actualidad, Asientos Esteban cuenta con apenas 95 empleados, frente a los 220 que tenía al comienzo de la crisis. La planta ha pasado por distintos ERE con despidos y rebajas salariales, por lo que la adjudicación del nuevo producto supondría garantizar su supervivencia en una situación muy complicada.
El objetivo de la dirección es comenzar a fabricar el nuevo producto (asientos de conductor para camiones y autobuses) a partir de marzo o abril de 2017, si bien la implantación de las líneas de trabajo sería paulatina. De esta manera, de completarse con éxito, se terminarían generando alrededor de un centenar de puestos de trabajo nuevos. La decisión requeriría de una inversión relevante en tecnología y maquinaria para la adaptación de las líneas de montaje y seguramente cuente con el apoyo del Gobierno de Navarra. El montante de las inversión no se ha notificado a la plantilla, a la que se confirmó la pasada semana la adjudicación del producto, que será compartido con Alemania.
La noticia ha sido recibida con alivio dentro de la plantilla, que veía peligrar el futuro de una empresa nacida en 1958 en Pamplona, que había perdido tamaño y relevancia dentro de la multinacional. La crisis económica golpeó de lleno a la empresa navarra en plena celebración de su 50º aniversario, cuando se planteaba abrir plantas en China, India y Polonia. Solo en Landaben su facturación rondaba los 40 millones de euros, una cifra que se incrementaba hasta los 70 si se tenía en cuenta lo que aportaban las delegaciones de Reino Unido, Brasil y México. También contaba con una planta en Irán. En la actualidad, Isringhausen cuenta con una fábrica también en Turquía.
Según los datos presentados ante el Registro Mercantil, Isringhausen cerró el año pasado con una facturación en Navarra de apenas 19,1 millones de euros, frente a los 16,4 millones del año 2014. Tras sufrir años de pérdidas (3,1 millones en 2011 y 2,07 en 2012), la planta equilibró su cuenta de resultados en 2013 y cerró los dos siguientes ejercicios con un resultado neto positivo superior a los 600.000 euros. El resultado de explotación de 2015 registró ya una sensible mejoría hasta rondar los 1,5 millones de euros, lo que da una idea del esfuerzo hecho en la planta.
La llegada del nuevo producto -los asientos de conductor son los que incorporan un mayor valor añadido al incorporar mejoras ergonómicas y de suspensión- reforzaría así una planta que, como en tantos otros casos, mantuvo capital local hasta mediados de los años 80. En 1986 fue adquirida por Achter&Ebels (Aunde Group), que en 1991 tomó el control de Isringhausen, convirtiéndose en líder mundial en su mercado. Insringhausen tiene su sede central en Lemgo, situada en el noroeste de Alemania, donde se realiza el desarrollo y la fabricación de los asientos para los vehículos comerciales.
Clientes. A lo largo de décadas de trabajo, Esteban ha acumulado abundante conocimiento que le ha permitido contar con clientes como Chrysler, Iveco-Pegaso, John Deere, Mercedes Benz, Nissan y Seat Volkswagen, entre otros.
Nuevo director desde 2015. La fábrica está dirigida desde noviembre de 2015 por Juan Córdoba Iturriagoitia, licenciado en Ingeniería mecánica por la Universidad de Navarra y con máster en Ingeniería de Materiales y Fabricación por la Universidad Pública de Navarra. Acumula una amplia trayectoria en el Grupo Isringhausen desde sus inicios en la multinacional en el año 1999 como director industrial.