pamplona - La dirección de Miasa presentó ayer al comité un expediente de regulación de empleo que afecta a 28 trabajadores, 19 de mano de obra directa y nueve indirecta, todos de la sección de taller. Alegó causas organizativas y productivas, por lo que desvinculó este proceso de la negociación del pacto de empresa pendiente.

Miasa se comprometió en una nota a que “no va a proponer ningún ajuste salarial ni ahora ni en la futura negociación del pacto” y que impulsará esta última “una vez culmine el actual proceso de ERE”. La proveedora en fabricación de horquillas para cajas de cambios del sector de la automoción suma actualmente 127 trabajadores (cien en taller y el resto en oficinas). La medida supone reducir aproximadamente en un tercio el número de operarios en producción, de unos 100 a 72, ya que perjudica a mano de obra directa e indirecta -personal de calidad, jefes de equipo, mantenimiento o expedición-, explicaron fuentes consultadas por este periódico. Las extinciones de contrato implican a la línea de mecanizado que, según adelantó la dirección, “va a padecer falta de carga de trabajo por la pérdida de proyectos”. En estos momentos, ocho trabajadores de esta sección están regulados hasta diciembre. Miasa detalló que la disminución de pedidos en mecanizado le obligó a “elaborar un plan industrial para garantizar la continuidad de la planta y aumentar la competitividad”.

elecciones sindicales La dirección y el comité constituyeron ayer la mesa de negociación del ERE y pactaron un calendario para el próximo mes. En mitad de este proceso, la plantilla votará en las elecciones sindicales el 14 de diciembre. Los trabajadores elegirán un comité de nueve delegados, porque ahora la plantilla supera los cien empleados. Con el ERE propuesto ayer, el número de trabajadores descendería de 127 a 99. Esta caída afectaría a la composición del comité, ya que con una plantilla por debajo de cien, los delegados pasan de nueve a cinco. Sin embargo, si se mantienen los comicios para escoger a nueve representantes, es previsible que la dirección crea que con este ERE quede una plantilla por encima de los cien, es decir, que al final del proceso puede variar la cifra de 28 despidos iniciales al rebajar las extinciones.

protesta toda la semana La parte social, integrada por tres delegados de LAB, tres de CCOO, uno de ELA y dos independientes, ha convocado paros de una hora en los tres turnos para rechazar este expediente durante toda la semana. LAB contó que convocaron asambleas para informar de los despidos y de los paros. CCOO manifestó que su sindicato “no quiere mezclar la negociación del ERE y del pacto de empresa” y ELA defendió “una huelga indefinida por el chantaje que ha propuesto la dirección” y exigió “un plan industrial real que garantice el empleo”.

La próxima reunión del periodo de consultas tendrá lugar el próximo lunes 26.

Calendario. La dirección y el comité pactaron un calendario provisional del ERE que contempla las siguientes fechas de reunión: 26 y 30 de noviembre; y 11, 17 y 18 de diciembre.

Una hora de paros. El comité ha registrado paros de una hora por turnos desde hoy hasta el viernes: de 13.00 a 14.00 horas para los trabajadores que cubran el turno de mañana; de 14.00 a 15.00 horas para los de tarde; y de 1.00 a 2.00 para los de noche.

Miasa: “Proceso de diálogo constructivo”. En una nota, la dirección abogó por “un proceso de diálogo constructivo, que garantice la mejor solución, asegurando la continuidad de la planta y el mayor número de empleos”. Miasa está “totalmente dispuesta a hacer los máximos esfuerzos que garanticen la mejor solución”, dijo.

Inversiones de cinco millones. La dirección ha invertido cinco millones en la planta desde 2015. La sección de fundición por inyección “ha incrementado el empleo”, pero la de mecanizado “no ha mejorado la situación”, justificó la empresa.