PAMPLONA. La mujeres navarras dejan de ingresar anualmente más de 1.300 millones de euros "como consecuencia de la percepción de salarios, prestaciones por desempleo y pensiones más bajas que los hombres", una cifra que representa casi un tercio del montante total de los Presupuestos Generales de Navarra, según el informe anual que elabora el sindicato UGT sobre la situación de la mujer en el mercado laboral de Navarra.

El informe recoge que la precariedad en la contratación, el trabajo a tiempo parcial, las ocupaciones más bajas y peor pagadas y la asunción "abrumadoramente mayoritaria" de la responsabilidad en la conciliación laboral y familiar explican que las mujeres navarras ingresen por salarios 8.152,99 euros anuales menos al año que los hombres, es decir un 28,02%, y que esta "discriminación", que también se produce en las prestaciones por desempleo, "se perpetúe tras la jubilación, con unas pensiones 555,14 euros mensuales más bajas que las que perciben los hombres".

UGT ha señalado que el cambio de ciclo económico a partir de 2013, con un crecimiento sostenido de la economía, se ha traducido en un aumento del empleo y una reducción del paro, tanto en el caso de los hombres como de las mujeres.

Según el informe, aunque desde hace seis años la disminución del paro masculino ha sido mayor que la del desempleo femenino, abriendo la brecha de género hasta 5,42 puntos en 2017, la mejor evolución del empleo femenino en 2018 ha reducido esa brecha en tasa de paro a menos de la mitad, 2,01 puntos, la diferencia más baja desde 2014.

De igual forma, la brecha de género en tasa de empleo, pese a que se ha ido reduciendo de forma prácticamente constante desde el inicio de la crisis, en 2018 se ha recortado "drásticamente", para situarse en 8,89 puntos, la diferencia más reducida de los últimos diez años.

"Pero estos son todos los únicos datos positivos que pueden extraerse del análisis de género del mercado laboral de Navarra", ha señalado UGT.

Así, ha afirmado que "el análisis cualitativo evidencia una evolución radicalmente contraria, estableciendo que el patrón de empleo femenino se caracteriza en Navarra por la precariedad, la discriminación y los bajos salarios".

En lo referente a la calidad del empleo, la conclusión del informe es que "se contrata temporalmente a más mujeres que hombres y de forma abrumadoramente mayoritaria con jornada a tiempo parcial". "Los contratos temporales son en un 53,2% para mujeres, que acaparan los contratos a tiempo parcial, con un 80,3% del total, frente a sólo un 19,7% de parcialidad masculina", añade.

El informe señala que la ocupación por sectores "también constata una feminización de la precariedad". Así, mientras las mujeres alcanzan una ocupación del 60,7% del sector servicios, tan solo representan el 26,7% de la ocupación en la industria, "sector con mayor estabilidad y salarios más altos".

Además, las mujeres directivas y gerentes son en Navarra menos de la cuarta parte que los hombres. Del total de personas que conforman dicho grupo profesional, el 22,7% son mujeres frente al 77,3% que son hombres.

Por otro lado, el informe expone que la conciliación es uno de los indicadores "más significativos de la situación de desigualdad por razón de género, ya que está en el origen de las bajas tasas de actividad femeninas, menor tasa de empleo, salarios más bajos, menor acceso a la protección social y peor calidad de vida".

En este capítulo, UGT considera que hay tres cifras "significativas y escandalosas". En concreto, señala que el 96,44% de los permisos por maternidad correspondieron en 2018 a mujeres, el 92,97% de las excedencias por cuidado de hijas o hijos también fueron femeninas, y el 89,22% de las excedencias por cuidado de familiares recayeron en mujeres.

El informe señala que "el empleo precario de la mujer, su ocupación en sectores peor remunerados, su discriminación profesional y la asunción casi en exclusiva de la conciliación se traducen en una desigualdad salarial que se ha hecho estructural". "Los últimos datos disponibles de la Encuesta de Estructura Salarial (2016) sitúan la brecha salarial por razón de género en Navarra en un 28,02%, lo que traducido a euros significa que la mujer ingresa de media 8.152,9 euros menos al año", explica.

La diferencia entre las pensiones de jubilación masculinas y femeninas es del 37,88%, porcentaje que se traduce en 555,14 euros al mes.

Según UGT, "el conjunto de las brechas de género privan a las mujeres navarras de unos ingresos anuales de 1.333,7 millones de euros". El desglose de esta cifra es de 1.072 millones de euros anuales menos en salarios, 10,1 millones de euros anuales menos en prestaciones por desempleo y 251,6 millones de euros anuales menos en pensiones de jubilación.