pamplona - Unas 200 personas se concentraron ayer en Altsasu para pedir la readmisión de una trabajadora de la Clínica Josefina Arregui despedida hace unos días después de incorporarse a su puesto de trabajo tras un año de excedencia. “Su objetivo era formarse en su profesión para poder dar mejor servicio a los propios usuarios y a la clínica”, señaló Esther Gasanz, presidenta del comité de este centro psicogeriátrico con tres delegadas de ELA. “El despido ha sido improcedente, reconocido por la empresa al no haber motivos”, dijo.

Gasanz destacó la incertidumbre en la plantilla, con más de medio centenar de trabajadoras y trabajadores. “Hoy ha sido ella, pero mañana podemos ser cualquiera”. Asimismo, recordaba que hace unos días 43 trabajadoras y trabajadores suscribieron un documento en el que se pedía la reincorporación inmediata de su compañera. “Ante la negativa de la gerencia, hemos decidido visibilizar el despido”. Por otro lado, Gasanz manifestaba que hace unos meses también salieron a la calle para denunciar la “grave situación” que atraviesa la clínica. “Aunque ha mejorado algo con el nuevo convenio, sobre todo a la hora de que el personal pueda coincidir de vacaciones y en el vestuario, todavía sigue siendo insuficiente”, señaló. Con los salarios congelados desde hace diez años, la mejora salarial ha sido del 1,25%. “Partimos de unos salarios mínimos. Estos problemas y otros se solucionarían con un mejor concierto con el Gobierno de Navarra. Seguiremos luchando por nuestros derechos laborales y puestos de trabajo”, aseguró. - N. Mazkiaran