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La OCDE sitúa a España a la cabeza del desplome económico mundial en 2020

El PIB nacional se podría contraer un 14,4% si hay un fuerte rebrote del virus

- La economía española será la más afectada de todos los países que componen la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con una contracción de su producto interior bruto (PIB) en 2020 que llegará hasta el 14,4%.

Según las previsiones económicas presentadas ayer por el organismo que preside el mexicano Ángel Gurría, se estiman contracciones similares para todas las principales economías de la zona euro, aunque España será la principal afectada entre todos los países que componen la moneda común.

La OCDE decidió en esta ocasión presentar dos posibles escenarios. El primero contempla que no habrá un segundo rebrote del covid-19 en 2020, por lo que el PIB de España se contraerá un 11,1% este año y experimentará un repunte del 7,5% durante 2021.

En este escenario, el país más afectado de la OCDE sería Reino Unido, con una caída de su PIB del 11,5% en 2020 y un crecimiento del 9% en 2021. Por detrás se situarían Francia, que se contraerá un 11,4% en 2020 y crecería un 7,7% el año que viene; e Italia, cuyo PIB descendería un 11,3% este año y aumentaría también un 7,7% el próximo.

Alemania, la mayor economía de la UE, se contraería un 6,6%, pero en 2021 experimentaría un repunte del 5,8%. El conjunto de la eurozona observaría un descenso del PIB del 9,1% en 2020, mientras que en todo el mundo la contracción sería del 6%.

El segundo escenario contemplado por la OCDE contempla que se producirá una nueva oleada de contagios en la segunda mitad del año. Si esto ocurriera, España pasaría a ser el país más afectado de toda la OCDE, ya que su PIB bajaría un 14,4% en 2020 y únicamente crecería un 5% en 2021.

Por detrás de España se situarían el resto de economías europeas. Francia se contraería un 14,1% este año para crecer un 5,2% el que viene, mientras que Italia descendería un 14,1% en 2020 y repuntaría un 5,2% en 2021. Reino Unido registraría una caída del 14% este año, mientras que la de Alemania será del 8,8% y en el conjunto de la zona euro alcanzará el 9,4%.

La OCDE explicó que la recuperación más lenta de España en el escenario más pesimista se debe a que un segundo brote del virus provocará “efectos más persistentes” en el mercado laboral, en la situación financiera de las empresas y en los hogares.

“En ambos escenarios, la caída en la demanda doméstica, debido a la destrucción de empleo y la paralización de la actividad, es la clave de la contracción. La reducción de la demanda externa, especialmente del turismo, afectaría mucho a la economía en 2020”, explicó la OCDE.

En este sentido, el club de países señaló que la expansión de la capacidad de los hospitales y de testeo de casos, así como la rápida identificación de personas infectadas, serán “cruciales” para prevenir futuros brotes.

Con respecto al mercado laboral, las previsiones de la OCDE suponen eliminar la mejora de los niveles de empleo en los últimos años. En el escenario con un solo brote, la tasa de paro llegaría hasta el 19,2% este año, cinco puntos porcentuales más que el año pasado, mientras que en 2021 todavía estaría situada en el 18,7%.

El peor escenario posible sería en caso de que haya un segundo brote. En ese caso, la tasa de desempleo escalaría hasta el 20,1% en 2020 y volvería a subir en 2021 hasta llegar al 21,9%, lo que supondría volver a máximos desde 2015.

La OCDE no daba previsiones para España desde noviembre, ya que en las actualizaciones que realiza entre sus previsiones de otoño y primavera únicamente incluye a Alemania, Italia y Francia como países de la zona euro. En ese momento, el organismo preveía un crecimiento del 1,6% para este año.

Cuestionada en rueda de prensa sobre el mayor impacto de un hipotético rebrote de la pandemia en la economía española, la economista jefe de la OCDE, Laurence Boone, quiso dejar claro que todos los países se verán muy afectados, aunque con diferencias en el el impacto económico “dependiendo de la especialización económica”.

“El turismo se está viendo muy gravemente afectado, los servicios que requieren de un contacto físico muy estrecho se están viendo afectados, así como los países con una proporción más alta en el valor añadido en esos sectores”, señaló Boone.