- La recuperación del empleo no solo es desigual para los trabajadores. Cada sector económico la vive de una manera. Y mientras algunos han superado ya los niveles de empleo previos a la pandemia, otros bracean contra las restricciones o contra los tiempos. La hostelería, que se ha dejado uno de cada seis puestos de trabajo y el comercio, con una merma de más de 600 puestos de trabajo en dos años, se encuentran lejos de recuperar los niveles de 2019.

Entre ambas actividades han perdido cerca de 4.000 puestos de trabajo. Una cifra que inferior a la que han generado la salud y la educación, con unos 5.000 nuevos ocupados. Los mayores recursos públicos que ha habido que dedicar a combatir la enfermedad han acelerado en cualquier caso una tendencia que no es nueva. Una sociedad más envejecida y más preocupada por su salud demanda de mayores recursos sanitarios. Y, al mismo tiempo, la necesidad de incorporar una formación completa y continua ha hecho de la educación uno de los motores del empleo en los últimos años. Más de 52.000 personas trabajan en Navarra en estos dos sectores, casi 31.000 en las actividades sanitarias y los servicios sociales.

Por delante de ambas se sigue situando la industria manufacturera, que en mayo de 2021 daba empleo a 68.329 personas, frente a las 67.449 de mayo de 2019, el último periodo comparable. El crecimiento, aunque modesto, muestra la vitalidad de un sector que sigue siendo clave y que ha salido reforzado de una experiencia traumática: no fabricar supone depender de cadenas de suministro frágiles.

También la construcción parece haber salido indemne de esta crisis. Con 400 empleos más que hace dos años, afronta ahora una industrialización inevitable.