Desde este viernes 1 de abril las gasolineras empiezan a aplicar una rebaja de 20 céntimos en el litro de combustible. En este primer día muchos conductores que llevaban esperando a la aplicación de este rebaja se han apresurado a repostar, lo que está generando largas colas. A esto hay que sumar que algunas estaciones de Repsol han tenido que parar debido a una caída generalizada del sistema informático ante la gran afluencia de conductores.

"Lo que está sucediendo es una acumulación de operaciones. Es cierto que los sistemas se están ralentizando ante el pico registrado, pero estas incidencias han sido algo puntual", ha explicado la compañía, que prevé que a lo largo del día "la situación se vaya normalizando" y se llegue a "una zona valle de peticiones".

En varias gasolineras de Repsol -propietaria de la mayor cadena de estaciones de servicio, con más de 3.300 en todo el Estado español-, alguna de ellas ha tenido incluso que detener su actividad, al no poder acceder al sistema informático para registrar los pagos y aplicar el descuento.

El descuento de los 20 céntimos forma parte de las medidas económicas aprobadas por el Gobierno español para hacer frente a los efectos de la guerra de Ucrania en las empresas y familias.

Revisar el ticket

La rebaja se hará directamente al repostar en la gasolinera, por lo que los usuarios deberán comprobar que se ha hecho el descuento en el ticket, donde debe figurar el precio anterior al descuento y el final con la bonificación aplicada. De esta forma, aunque el descuento no se verá reflejado mientras se llena el depósito, la bonificación estará presente a la hora del pago.

El Estado asumirá 15 céntimos y los 5 restantes serán a cargo de las petroleras, aunque algunas ya han anunciado rebajas superiores.

En el caso de las pequeñas y medianas suministradoras, que suponen alrededor de un tercio de la cuota de mercado, será el Estado el que asuma al completo el descuento.

Los anticipos a cuenta podrán solicitarse por el importe máximo de la bonificación que correspondería al 90% del volumen medio mensual de los productos incluidos en el ámbito objetivo de la bonificación que haya vendido la estación de servicio en el año 2021, de acuerdo con lo reportado al censo de empresas que realizan las ventas directas a los consumidores finales. El importe del anticipo, según lo establecido en el Real Decreto-ley, no podrá ser superior a los dos millones de euros, ni inferior a los 1.000 euros.