La inflación ha llegado a los contratos de la obra pública, que el Gobierno de Navarra tiene la intención de revisar de manera urgente. El objetivo, evitar que una actividad económica clave se paralice en los próximos meses, tras el alza continua de precios en las materias primas, que está estrechando los márgenes de las constructoras y de las empresas adjudicatarias.

“El crecimiento acelerado de precios está impactando también en contratos de menor duración”, ha explicado este miércoles Elma Saiz, consejera de Economía y Hacienda del Gobierno de Navarra, tras recordar el Decreto Ley Foral 1/2022, que ya establecía medidas extraordinarias en respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra de Ucrania, en el ámbito de la contratación pública. 

La nueva medida, que permitirá incrementar los precios de los contratos, será adoptada “ con urgencia”, ha dicho la consejera, quien admitía que estirar los plazos supone “un riesgo de paralización en la ejecución de estos contratos, con el consiguiente perjuicio para el interés público”. De hecho, numerosas entidades públicas, desde la UPNA hasta diferentes ayuntamientos, han visto cómo diferentes licitaciones quedaban desiertas. La incertidumbre es tan elevada que muchas empresas eran incapaces de presupuestar con cierto margen de seguridad una obra que se ejecutará en un plazos de cuatro, cinco o seis meses. 

Así, en la rueda de prensa posterior a la sesión de Gobierno ha indicado que si el contrato tiene una duración igual o superior a 12 meses, el incremento del coste debe exceder del 5% y se calculará sobre la totalidad del importe certificado de contrato. En caso de que el contrato tenga una duración inferior a doce meses, el incremento del coste, que también debe ser superior al 5%, se calculará sobre la totalidad de los importes del contrato certificados, si bien el periodo mínimo de duración del contrato para que pueda ser aplicable esta revisión excepcional de precios será de cuatro meses.

La revisión de los contratos no se acometerá en todos los casos, sino cuando el incremento del coste sea de materiales siderúrgicos, bituminosos –como el alquitrán–, aluminio o cobre.

Más agilidad en las subvenciones

 Además, el Gobierno ha dado el visto bueno a un acuerdo por el que se aprueba y somete a la deliberación del Parlamento el Proyecto de Ley Foral de modificación de la Ley Foral 11/2005, de 9 de noviembre, de Subvenciones, para que las conocidas como “subvenciones nominativas” se puedan aplicar a proyectos cuya ejecución exija un plazo superior al del ejercicio presupuestario.

La modificación que se propone permite pagar estas subvenciones dentro del ejercicio presupuestario, aunque no se haya finalizado la actuación objeto de subvención.

El pago anticipado de subvenciones ya está contemplado en la Ley Foral para otras situaciones y con esta modificación se amplía el abanico de casos en los que se podrá pagar la subvención antes de la ejecución de la actividad subvencionada, solucionando así las dificultades actuales para establecer subvenciones nominativas para proyectos cuya duración supera el límite del ejercicio, apuntó.