Arranca el plan MOVES III: las ayudas al coche eléctrico empezarán a tramitarse el 25 de junio
Convivirá con el programa vasco para la sustitución de vehículos antiguos, pero ambos son incompatibles
Arranca el MOVES III, el programa de ayudas de hasta 7.000 euros para la compra de un vehículo eléctrico, y lo hace con carácter retroactivo. Las solicitudes empezarán a tramitarse a través del Ente Vasco de la Energía (EVE) a partir del 25 de junio, pero se podrá aplicar a cualquier compra realizada desde el 1 de enero de este año. Recordemos que el MOVES III es un programa estatal que prorrogó el Gobierno español el pasado abril y que estará disponible hasta el 31 de diciembre, pero es el Ejecutivo vasco, a través del EVE, el encargado de gestionar las ayudas. En Euskadi contará con un presupuesto de 14,9 millones de euros y se espera que ayude a poner en circulación unos 2.000 vehículos eléctricos. Toda la información, según el consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, estará disponible a partir de mañana miércoles.
El programa mantiene las cuantías que se otorgaban a la compra de un vehículo eléctrico, de forma que los coches 100% eléctricos que sustituyan a otro vehículo antiguo achatarrado podrán recibir 7.000 euros de subvención. También se destinarán ayudas para seguir potenciando la infraestructura de puntos de recarga, que pueden optar a una subvención de hasta el 70%. Y es que el objetivo de este programa es impulsar la movilidad sostenible y la implantación de puntos de recarga. Es por ello que el presupuesto se divide en 8,4 millones destinados a apoyar la compra de vehículos eléctricos nuevos y otros 6,5 millones al segundo objetivo. En la última convocatoria de este programa se resolvieron de forma positiva 18.000 solicitudes y se pusieron en circulación 7.800 vehículos, además de impulsar la instalación de 6.700 puntos de recarga. Euskadi es la segunda comunidad autónoma con más infraestructuras de este tipo, 55,6 puntos por cada 1.000 km.
"Debemos de ser capaces de ayudar a la ciudadanía a acceder a vehículos nuevos que supongan generar menos emisiones, a la vez que apoyamos al sector de la automoción, que es clave para la economía vasca, generando 40.000 empleos en Euskadi", apuntó Jauregi, quien recordó que el 35% del total de emisiones de gases de efecto invernadero en el territorio son generadas por el transporte. "Debemos acometer la descarbonización del transporte por carretera y, para ello, el vehículo eléctrico es un gran aliado", añadió.
Neutralidad tecnológica
El MOVES III convivirá a partir de este mes con el programa vasco de ayudas a la compra de vehículos o furgonetas de menos emisiones, vigente desde el pasado 1 de abril. Ambos son incompatibles, es decir, no se puede complementar una ayuda con la otra. Por lo tanto, quien esté interesado en sustituir su vehículo deberá elegir entre uno de los dos programas. La intención del Gobierno vasco con este programa es rejuvenecer un parque de vehículos con 14 años de media y altamente contaminantes. Pueden acogerse a este él todos aquellos ciudadanos que tengan un coche de más de 20 años de antigüedad (contando desde su primera matriculación) o que emitan más de 175 gramos de CO2 por kilómetro (g/km) en el caso de los coches y más de 200 g/km en el caso de las furgonetas y que quieran sustituirlo por uno nuevo. Un requisito obligatorio es que el antiguo debe ser achatarrado.
A diferencia del MOVES III, que apuesta por el vehículo eléctrico, este programa está enfocado en la neutralidad tecnológica, es decir, en la compra de vehículos menos contaminantes pero de todo tipo de combustión. El requisito es que las nuevas adquisiciones emitan menos de 125 g/km (coches) y 150 g/km (furgonetas) de CO2. "La apuesta del Gobierno vasco para avanzar en movilidad sostenible es por la neutralidad tecnológica. Apoyo al vehículo eléctrico, por supuesto, pero también a otros vehículos nuevos de menos emisiones capaces de impulsar una descarbonización equilibrada e inteligente del transporte por carretera", explicó el consejero.
Según informó Jauregi, hasta el momento se han recibido 600 solicitudes y reconoció que el plan flaquea en la pata de las furgonetas. "Una de las primeras conclusiones a las que hemos llegado es que las furgonetas se usan generalmente en comercios o por parte de autónomos y no son en propiedad, sino que son de renting. Además, la edad media es bastante inferior a la de los turismos", apuntó Jauregi. El consejero admitió también que la antigüedad que se exige para la sustitución de un vehículo, 20 años, puede ser elevada teniendo en cuenta que la media de edad de los coches en Euskadi es de 14 años. "Estamos viendo cómo mejorar, pero de momento no se pueden hacer cambios en el programa", señaló.
Casi un tercio de los coches podrán beneficiarse de la ayuda vasca de 3.500 euros
Pero Jauregi quiso poner también una nota positiva: "Desde Faconauto, la patronal de los concesionarios, nos dicen que el 55% de los coches que se están comprando tienen menos de 120 gramos de emisión y también han visto un incremento de la demanda de coche nuevo. Esos eran parte de los objetivos que teníamos", indicó. Además, mantiene el objetivo de apoyar la compra de unos 2.000 vehículos hasta final de año.
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