Pamplona - “Prefiero que hagamos cuatro incorporaciones buenas, a que hagamos 12 por hacer”, admitía Jagoba Arrasate, entrenador de Osasuna, en declaraciones a este periódico. Lo hacía apenas tres días después de abrochar una exitosa temporada. También admitía que “tenemos que firmar un lateral izquierdo porque sólo tenemos a Endika; tenemos que firmar un central porque Unai se ha lesionado; y en otras posiciones tenemos que ir mirando cómo podemos mejorar”. Dicho y hecho, porque, a falta de confirmación oficial por parte de Osasuna, el técnico ya sabe que el próximo curso podrá contar en el flanco zurdo de la defensa con el ecuatoriano Pervis Estupiñán y en la delantera con Marc Cardona.

Al futbolista suramericano todavía le queda un partido para terminar la temporada con el Mallorca. A sus 21 años, ha actuado en el conjunto de Palma cedido por el Watford inglés, club que el próximo curso se lo va a ceder a Osasuna. Y Marc Cardona, que ya estuvo a punto de convertirse en rojillo en el pasado mercado invernal, va a reforzar la delantera a cambio de los aproximadamente 2,5 millones de euros que recibirá el Barça por el traspaso del atacante ilerdense de 23 años.

De las palabras de Arrasate se deduce que Osasuna ya ha conseguido dos de los cuatro refuerzos de garantías que persigue. Y ahora le va a tocar esperar para seguir mejorando las prestaciones de la plantilla y para eso va a tener tiempo hasta finales de agosto. Dos meses en los que deberá concretar qué ocurre con Xisco -sigue estudiando si le ofrece continuar o no-, con Rober Ibáñez -ha regresado al Getafe tras su cesión- y qué oportunidades surgen con la Liga a punto de comenzar o ya iniciada. - J.L.