Una temporada más debemos comenzar refiriéndonos a las novedades reglamentarias que traen las Reglas de Juego. Vaya por delante que los cambios son pocos y de escasa relevancia. Me referiré al más significativo.
Los que estudiamos las Reglas y los aficionados en general llevábamos ya muchos años quejándonos de una situación fea que no era atajada por los árbitros: Cuando el portero controlaba el balón con las manos lo retenía por encima de los seis segundos reglamentarios, sin que se le sancionara nunca, esperando que sus compañeros se colocaran y restando al juego bastantes segundos, una vez tras otra, además de robar rapidez y chispa al partido.
IFAB ha considerado la posibilidad de que la no aplicación de la norma viniera motivada por el corto espacio de tiempo que se concedía al portero y por la gravedad de la sanción con tiro libre indirecto dentro del área, de manera que ha decidido ampliar a ocho segundos el tiempo de posesión y reducir la sanción a un saque de esquina contra el equipo del portero.
Esta es la nueva redacción de la regla 8:” Se concederá un saque de esquina si un guardameta, dentro de su propia área, controlara el balón con las manos o los brazos durante más de ocho segundos antes de soltarlo”. “El árbitro decidirá cuándo el guardameta controla el balón y empiezan a contar los ocho segundos de retención y, con la mano alzada, efectuará la cuenta atrás de los últimos cinco segundos”. La regla aclara que el saque de esquina se efectuará desde el “córner” más próximo a la infracción.
Si nos fijamos en el texto concluiremos que resultará crucial la medición por parte del árbitro de esos tres primeros segundos para que la aplicación sea más o menos estricta, puesto que una vez levantada la mano con los dedos abiertos la cosa no tiene marcha atrás.
La norma debería tener una repercusión táctica positiva para dar una mayor vivacidad al juego acabando con esos tiempos muertos eternos que se tomaban los porteros con la complicidad de los árbitros. De la diligencia de éstos en la aplicación de la Regla dependerá su éxito y sentarán cátedra los primeros partidos profesionales que se televisen. Lo que hagan los árbitros de Primera División marcará la pauta en categorías inferiores.
Si se me permite una “rareza puritana” diré que en mi opinión esta modificación tiene un pésimo encaje con el espíritu de las Reglas porque el saque de esquina se aplica para reanudar el juego después de una salida de balón y en el caso que nos ocupa nos referimos a una infracción que debería reanudarse con un tiro libre, pero en fin, doctores tiene la Santa Madre Iglesia como decía el Catecismo.
*Formación del Comité Navarro de Árbitros de Fútbol.